La medida fue sorpresiva y se extiende hasta hoy. Se trata de un reclamo de medidas de seguridad y detuvo la producción de crudo en la cuenca neuquina, lo que provocó pérdidas que el gobierno neuquino estimó en 10 millones de dólares.
La provincia estimó que la medida generó 10 millones de dólares de pérdidas. El líder del sindicato reclamó seguridad.
El sindicato petrolero inició ayer un paro sorpresivo en reclamo de medidas de seguridad y detuvo la producción de crudo en la cuenca neuquina, lo que provocó pérdidas que el gobierno neuquino estimó en 10 millones de dólares. Para frenar la producción la producción de un millar de pozos de YPF «se puso en riesgo la seguridad» en varios yacimientos y hubo golpes contra inspectores y empleados de esacompañía, denunciaron desde la empresa estatal. No se afectó el gas. «Nos es común una medida de este tipo, con este nivel de violencia», dijo una fuente de la empresa a «Río Negro». Lo mismo fue ratificado por el gobierno neuquino que a través de la Policía difundió el nombre de un supervisor agredido por uno de los delegados del gremio a quien apodan «El Duende». En la comisaría 35 de Rincón de los Sauces declararon dos testigos de las amenazas y dieron el nombre del agresor. Hubo golpes y aprietes, indicaron en la denuncia.
El paro empezó ayer a las 15 y se mantendrá hasta hoy a la misma hora, pero el lunes puede definirse una extensión.
El líder del sindicato Guillermo Pereyra explicó que la medida llegó como corolario de una serie de reclamos que tienen que ver con el mal estado de los caminos, la falta de condiciones de seguridad y otras reivindicaciones como la zona desfavorable que exigen se lleve al 82%. Pero -aclaró- todo se aceleró a partir del incidente en el que hace tres días se incendió un tanque con 20 milones de litros de combustible en Rincón de los Sauces, más precisamente en el yacimiento Chihuido. Ver más
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