Dentro del Capítulo 16 sobre «Aparatos que puedan desarrollar presión interna» del Decreto 351/79 existe un artículo muy particular que es el 142 y que trata sobre recipientes de gases licuados a presión. Este presenta algunas características que conviene explicar y aclarar para su correcta aplicación, aunque técnicamente vamos a ver en el desarrollo del mismo que presenta algunos errores.
«Artículo 142- El almacenado de recipientes, tubos, cilindros, tambores y otros que contengan gases licuados a presión, en el interior de los locales, se ajustará a los siguientes requisitos:»
Análisis: En primer lugar hay que aclarar que este artículo se aplica sólo al interior de locales y no trata sobre condiciones para almacenamiento en el exterior, aunque algunas incisos pareciera que sí. Se menciona la palabra almacenamiento y ésto no quiere decir que se puedan usar locales interiores (cerrados) como depósitos de recipientes de gases comprimidos y/o Licuados. Esta situación tiene una explicación técnica. Por una lado, un escape de gas, especialmente aquellos que puedan poner en peligro la vida e integridad física de las personas, podrían generar un accidente del tipo incendio seguido de una explosión o deflagración violenta, intoxicación, asfixia, etc. El daño va a depender del tipo de gas que se escape. La medida de prevención es la técnica de ventilación que usa las corrientes de aire externas para diluir la concentración de las pérdidas, obvio, siempre y cuando éstas sean pequeñas. Ante un escape grande de gases, siempre es menos riesgoso que ocurra al aire libre. Ante gases altamente sensibles para la vida humana, se requieren almacenamientos especiales. Ver más