Cerca de 2 27O personas fueron rescatadas de trabajos esclavos en 2011 en Brasil, la mayoría de haciendas agrícolas, y 294 empleadores están expuestos a sanciones por este tipo de prácticas, informó hoy el Ministerio de Trabajo del gigante suramericano.
“Nunca tuvimos tantos empleadores irregulares al mismo tiempo”, dijo Alexandre Teixeira, responsable del programa de erradicación del trabajo esclavo del ministerio, en un comunicado oficial. Las autoridades brasileñas consideran trabajo esclavo al sometimiento laboral bajo condiciones denigrantes de salud, alimentación y alojamiento, y con salarios por debajo del mínimo (336 dólares mensuales).
La mayoría de las víctimas fueron reclutadas bajo engaño por traficantes de mano de obra, conocidos como ‘gatos’, que los trasladan lejos de su lugar de origen para trabajar en haciendas de caña de azúcar u otros productos agrícolas.
Sin embargo, también en la ciudad se han tornado frecuentes las denuncias de explotación laboral, en especial de extranjeros, que involucran a proveedores de ropa para firmas internacionales.