Bebé de un año y medio murió ahogado en una pileta

El pequeño se encontraba jugando junto con otros amigos cerca de su casa de Santiago. De inmediato los padres lo trasladaron al hospital, donde las tareas de reanimación resultaron infructuosas.

Un niño de un año y medio murió ahogado al caer a una pileta de lona en una vivienda de la localidad de Frías, a 150 kilómetros al oeste de la capital santiagueña, informaron hoy fuentes policiales.

El pequeño, que hace poco había aprendido a caminar, se encontraba jugando junto con otros amiguitos en cercanías de una pileta ubicada en un patio de tierra de una casa del barrio Sumampa.

Tras caer en la pileta, los padres lo trasladaron al hospital zonal donde las tareas de reanimación resultaron infructuosas.

La policía señaló que el niño falleció de «asfixia por inmersión» y que su cuerpo «no presenta signos de violencia».

Fuente: www.infobae.com

Los accidentes domésticos volvieron a tener más chicos como víctimas

Dos pequeños sufrieron descargas eléctricas y otro perdió los dedos de una mano en una picadora de carne.

Una seguidilla de accidentes domésticos que tuvo como víctimas a niños menores de diez años se registró en las últimas horas en Rosario. Mientras dos nenes recibieron descargas eléctricas que motivaron su internación, un tercero perdió las falanges de los cinco dedos de una mano al introducirla dentro de una picadora de carne. A esto se suman los casos de las dos chiquitas que sufrieron asfixia por inmersión al caer, una dentro de un balde de 20 litros de agua y la otra en una pileta. Ambas continúan internadas en terapia intensiva.

Según destacó ayer la vicedirectora del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, María del Carmen Carradori, este tipo de accidentes «aumenta en el verano ya que los chicos desarrollan una mayor actividad al aire libre y están mucho más expuestos».

Lo cierto es que en las últimas horas no fueron pocos los chiquitos que debieron ser trasladados al Vilela al sufrir distintos accidentes.

La ola de este tipo de sucesos había comenzado el fin de semana pasado, cuando el Servicio Integrado de Emergencia Sanitaria (SIES) tuvo que trasladar a cuatro niños que sufrieron accidentes en piletas y uno de ellos falleció.

El martes, una beba de 18 meses cayó dentro de un balde de 20 litros de agua y dos días después una nena de dos años sufrió un accidente similar en una pileta de la zona sudoeste. Ambas continuaban ayer en terapia intensiva del Vilela donde monitoreaban su evolución (ver aparte).

Los nuevos sucesos se registraron el jueves pero recién tomaron estado público ayer. En uno de ellos, Elías Fernández, un nene de 9 años, recibió una descarga eléctrica al tocar una pared de su casa que se encontraba electrificada, al parecer, por la presencia de un cable suelto. El accidente se produjo cerca del mediodía en pasaje 1.727 Nº7960, en la zona oeste.

Según destacó ayer Carradori, el niño fue internado en terapia del Vilela, estaba evolucionando bien y evaluaban trasladarlo hoy a una sala común.

Otro accidente similar se produjo unas horas después en la zona sur y tuvo como víctima a Agustín Ojeda, un nene de 7 años, quien habría tocado una caja de luz en España entre Deán Funes y Garay y recibió una descarga.

El pequeño también fue trasladado al Vilela, donde quedó en observación y ayer le dieron el alta.

El tercer caso se produjo durante la tarde en una fábrica de pastas, cuando Adriel Germil, de 8 años, manipulaba junto a su papá una picadora de carne e introdujo su mano dentro de la máquina. Carradori destacó que el pequeño sufrió la amputación de las cinco falanges de la mano izquierda. «El jueves a la noche lo operaron y evoluciona bien en la sala de terapia», señaló.

Carradori destacó ayer que los accidentes domésticos son «muy comunes», y subrayó que «en verano aumentan notablemente debido a que los chicos desarrollan mayor actividad al aire libre y, por lo tanto, están mucho más expuestos».

Fuente: Diario La Capital

Accidentes domésticos: dos niños recibieron descargas eléctricas

Dos accidentes similares en los que dos niños recibieron descargas eléctricas se produjeron ayer en distintas zonas de la ciudad.

El primero de ellos sucedió a las 11.30 en la vivienda ubicada en pasaje 1727 Nº 7960, en la zona oeste, cuando Elías Fernández, de 9 años, tocó una pared de la casa que se hallaba electrificada por un cable suelto lo que le provocó sufrió quemaduras y pérdida de conocimiento, por lo que fue trasladado a un centro sanitario de la zona de Rivarola y Colombres, para ser derivado luego a bordo de una ambulancia del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies) al Hospital Víctor J. Vilela donde se encuentra en estado estable en la sala de cuidados intensivos.

Según las pericias del personal policial de la comisaría 32ª, el cable de maza de la bajada del tendido principal estaba desprendido y al tomar contacto con una caja de metal distribuía electricidad por las paredes, al parecer esto se habría ocasionado por efecto del temporal que afectó el miércoles pasado a la ciudad.

En el otro de los casos ocurrido en la zona sur a las 14.10, Agustín Ojeda, de 7 años, tomó contacto con una caja de luz y recibió una descarga eléctrica de gran magnitud que le provocó quemaduras en la mano izquierda y pérdida de conocimiento. El hecho sucedió en España entre Dean Funes y Garay y la víctima fue trasladada por un familiar al Hospital Vilela, donde fue alojado en observación, recuperó el conocimiento, pero aún permanece internado.

Fuente: Diario La Capital

Otra nena se cayó a una pileta, está grave y es el sexto caso de la semana

Llegó al hospital con un paro cardiorrespiratorio. Los médicos lograron resucitarla y la conectaron al respirador.


«La nena está sedada», explicó el médico Gustavo Sciolla.

Una nena de dos años, María Milagros Ramírez, quedó internada ayer en grave estado y conectada a un respirador artificial en la sala de terapia intensiva del Hospital Vilela después de caer y permanecer sumergida durante varios minutos en la pileta de su casa, en la zona sudoeste de Rosario. «La chiquita llegó al hospital con un cuasi ahogamiento y en paro cardiorrespiratorio», confirmó ayer la vicedirectora del centro asistencial, María del Carmen Carradori, un cuadro que los médicos alcanzaron a revertir para trasladarla a terapia intensiva.

Al cierre de esta edición, Carradori aseguró que dentro de su gravedad, la nena estaba «estable y por ahora sin complicaciones», aunque habrá que seguir su evolución durante, por lo menos, las próximas 48 horas. Sólo después se podrá determinar si la asfixia le causó o no alguna lesión. El de María Milagros representa el sexto caso de chicos que sufrieron asfixia por inmersión en Rosario desde el último fin de semana.

El hecho ocurrió en el jardín de una casa de Lamadrid 2760 poco antes del mediodía, donde suelen jugar la nena ahora accidentada, sus dos hermanitos (de ocho y once años) y tres primos que viven atrás. En ese fondo se encuentra la pileta de fibra de vidrio.

A las 11.50, una de las primas de la chiquita – que, según relató su abuelo, suele ser quien más juega y cuida de ella – se dio cuenta de lo que había ocurrido y le avisó de inmediato a la mamá, Analía Brudina, quien alcanzó a sacar a la nena del agua. Desesperada, la mujer llamó a una ambulancia y a una vecina que es médica jubilada, Cristina Maggi, quien realizó las primeras maniobras de reanimación.

Antes de que llegara la ambulancia, un móvil de la Patrulla Urbana que pasaba por la esquina advirtió una situación anómala por la gente «amontonada» frente a la casa y ofreció su auxilio. Al enterarse de lo ocurrido, el oficial Flavio Arana no esperó más: cargó a la nena y a la médica que seguía intentando reanimarla y, con las balizas y la sirena encendidas (más dos móviles policiales que fueron cortando el tránsito), la trasladó de urgencia al Vilela. «Lo único que pensaba era que teníamos que llegar rápido», recordó todavía conmovido el policía.

Pese a los esfuerzos, María Milagros arribó al hospital con un paro cardiorrespiratorio del que los médicos del Vilela pudieron sacarla mediante nuevas maniobras de resucitación. Luego la nena fue llevada a la sala de terapia intensiva.

«La chiquita está sedada y conectada al respirador artificial, mientras tratamos de monitorear todas las posibles complicaciones que puedan ir surgiendo», explicó el médico de terapia Gustavo Sciolla, antes de recibir a los angustiadísimos padres, abuelos y tíos de la nena.

Aunque Carradori definió el cuadro como «grave», a las 17.30 de ayer, el abuelo de la criatura, Claudio Brudina, admitió que empezaba a acunar una esperanza. «Acaba de venir una de las médicas que la atiende y dice que la vio mejor», sostuvo. A esa misma hora los padres de María Milagros pudieron entrar a ver a su hijita.

Este es el sexto caso en la última semana. Aparte del de la beba que sigue en terapia en el Vilela (ver aparte), el Sies atendió a otros cuatro chicos asfixiados en agua: uno de ellos murió, otro sufrió lesiones y dos siguen recuperándose.

Fuente: Diario La Capital

Una nena de dos años cayó a una pileta y está en grave estado

Una nena de 2 años cayó este mediodía a una pileta de natación, en su casa de zona sur, de la que fue rescatada por personal de la Patrulla Urbana que la trasladó al Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde se encuentra internada en grave estado.

El accidente ocurrió a las 13 en una vivienda de Lamadrid 2760, cuando la nena, de nombre María Milagros R., cayó a una pileta mientras se encontraba junto a su madre, Analía B., de 36, quien llamó pidiendo auxilio a la policía.

Al llegar al domicilio, personal de la Patrulla Urbana asistió a la niña, logrando sacarla de un paro cardiorespiratorio, para luego trasladarla al Hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde sufrió otro incidente del mismo tipo por lo que se encuentra recibiendo cuidados intensivos y respira con ayuda de asistencia artificial, debiendo aguardarse al menos 24 horas para conocer su evolución.

Personal de la comisaría 21º se encuentran abocados a develar los motivos del accidente.

Fuente: Diario La Capital

Tucumán: tragedia por alimentos contaminados

La ingesta de alimentos, al parecer contaminados con agroquímicos, causó la muerte de tres niños y un hombre pertenecientes a una familia humilde del sur de la provincia.

José Florencio Herrera de 64 años recibió en su casa del barrio San Carlos (de la localidad de Villa Quinteros, 65 kilómetros al sur de esta capital) a sus nietos, ya que la madre debía ir a la cosecha del limón en la zona. Con los pocos pesos que tenían, Herrera y su esposa Nora Rivadeneira decidieron hacer un guiso con fideos y pollo para que comieran los niños. Lo que no sabían es que alguno de los alimentos habrían estado contaminado con pesticida.

La comida se llevó la vida de Nancy Vildoza de 10 años, Héctor Daniel Vildoza (13), Carlos Ledesma de apenas un año y medio y del propio Herrera, que murió cuando era trasladado hacia esta capital para ser atendido. Además fue trasladada al hospital del Niño Jesús de San Miguel de Tucumán, María Vildoza de 12 años que permanece en estado delicado.

Los investigadores, que se llevaron todos los elementos y componentes con los que se hizo el guiso para analizar, consideran que la hipótesis más fuerte para la intoxicación es el envenenamiento con productos químicos ya que en los predios de la vivienda observaron bidones y tachos con agroquímicos. Asimismo escucharon los dichos de familiares que relataron que los niños y el hombre después de comer comenzaron a ponerse morados, echar espuma por la boca y a tener convulsiones.

En el hospital de Concepción fueron atendidos Antonia Herrera (9), José Herrera (10), Patricia Vildoza (15), María Antonia Herrera (32), Tamara Herrera (4) y José Germán Vildoza (14). Todos ellos permanecen en observación pero ninguno presentaba síntomas.Según el relato que María Angela Alamaraz, hermana de Herrera, hizo a un diario tucumano «ellos (en referencia a los muertos) fueron los únicos que comieron el guiso. Los demás no tenían hambre».

María Antonia Herrera (32), que trabaja como cosechera del limón, cuando se enteró de la muerte de dos de sus hijos, su nieto y su padre entró shock y tuvo que ser internada en el centro médico sureño.

Manuel Riva. TUCUMAN. ESPECIAL
tucuman@clarin.com

Fuente: Diario Clarin

Una nena de 12 años fue herida de un escopetazo por su primo de 10

Los chicos estaban solos en la casa y el disparo sería accidental. La menor recibió el impacto en el abdomen y está internada con pronóstico reservado.

Una nena de 12 años fue gravemente herida de un escopetazo en su fiesta de cumpleaños. El arma fue disparada por su primo de 10 años mientras la manipulaba con unos amigos.

El accidente ocurrió ayer alrededor de las 19 en la ciudad de Córdoba, en una casa situada en Etruria 9200, de Villa Rivera Indarte.

Aparentemente los chicos encontraron una escopeta del padre de la nena y comenzaron a manipularla. Un primo de la nena, de 10 años, aparentemente disparó el arma y la hirió en la zona del abdomen en forma accidental.

Al momento del hecho los chicos se encontraban solos en la casa, pero los vecinos al escuchar la detonación se acercaron a ver qué había sucedido y llamaron a una ambulancia.

La nena herida fue trasladada al Hospital Infantil Municipal, donde permanece internada en terapia intensiva con pronóstico reservado, dijeron las fuentes policiales.

(Fuente: Télam)

Fuente: Diario Clarin

Por una confusión, un hombre puso nafta en una pava y voló su casa

Un santafesino de 63 años tomó por equivocación una botella en donde guardaba nafta y trató de hervirla. El quincho en donde se encontraba explotó, y le provocó quemaduras.

Una distracción casi le cuesta la vida a un hombre de 63 años de la provincia de Santa Fe. Roberto Almirón llenó su pava con nafta y la colocó en el fuego. Una explosión prendió fuego a su quincho y le provocó graves heridas.

En un descuido, Almirón confundió la botella de agua con una en la que guardaba nafta. Llenó su pava con el líquido, sin reparar en el error, informó el diario El Litoral.

Cuando el hombre prendió la hornalla, la chispa provocó una explosión que prendió fuego su quincho. Como consecuencia del incendio, Almirón sufrió quemaduras en las piernas y los brazos.

Fuente: www.infobae.com

Una nena murió aplastada por la cúpula de una pick-up en Santo Tomé

Santo Tomé. Una niña de tres años murió en la localidad santafesina de Santo Tomé al ser aplastada por la cúpula de una camioneta mientras jugaba en el garage de su casa, informaron hoy voceros policiales.

Las fuentes dijeron que la nena jugaba junto a un hermanito en el garaje de su casa, situada en Pellegrini al 3.600, cuando una cúpula de camioneta que estaba apoyada en unos caballetes cayó sobre ella.

La nena fue inmediatamente trasladada al hospital de Niños Orlando Alassia de Santa Fe, donde se le diagnosticó traumatismo encefálico gravísimo, que le causó la muerte un par de horas después de ser internada.

Luego del trágico desenlace, personal policial de la comisaría 23 de Santo Tomé inspeccionó el lugar del accidente y constató sus causas. (Télam)

Fuente: Diario La Capital

Conmoción en Florencio Varela: menor murió electrocutado por un cerco

Un chico de 14 años estaba jugando al fútbol con unos amigos cuando la pelota se les fue a la propiedad lindera. La finca tenía las rejas electrificadas y el adolescente murió en el acto al tocarlas.

Jonathan, de 14 años, murió ayer por la tarde luego de tocar una reja electrificada de una obra en construcción en el partido bonaerense de Florencio Varela.

Su muerte «destruyó a toda una familia, no hay palabras para describirlo», declaró en Telenueve Pablo, el tío del adolescente.

El hecho ocurrió en un predio donde un grupo de chicos jugaba al fútbol y en un momento determinado la pelota fue hacia una casa que estaba en contrucción y tenía todas las rejas de acceso electrificadas.

La casa tenía rejas en las ventanas, en la puerta y un enrejado perimetral, los cuales estaban electrificados aparentemente por cuestiones de seguridad, para evitar que ladrones pudieran acceder al lugar.

Jonathan fue rápidamente en busca de la pelota y, al tocar el enrejado, murió fulminado en el acto.

«La policía se portó muy bien con nosotros pero queremos hechos, queremos justicia», sostuvo Pablo.

Hasta el momento no se conoce el paradero del dueño de la finca. Se cree que el hombre pudo haber viajado a Paraguay a pasar las fiestas.

Fuente: www.infobae.com