Alstom condenada por riesgo de exposición al amianto de sus trabajadores

París, 6 mar (EFECOM).- Una filial del grupo francés Alstom, especializada en calderas, fue condenada hoy a una multa de 75.000 euros por el Tribunal de Apelación de Douai (norte de Francia) por la exposición al amianto de los trabajadores de una de sus plantas, a cuyo ex director se impuso una pena de cárcel sin cumplimiento.

El Tribunal de Apelación confirmó con esta pena máxima para la empresa la sentencia que había dictado el Tribunal Correccional de Lille en septiembre de 2006, pero redujo la condena de nueve meses de prisión sin cumplimiento que éste había fijado para el antiguo responsable de la fábrica.

El elemento significativo del dictamen de hoy, que en principio sentará jurisprudencia, es que establece la responsabilidad de la compañía por los riesgos que hizo correr con el amianto a sus empleados sin necesidad de que éstos hayan desarrollado síntomas de alguna afección.

De acuerdo con las conclusiones de los magistrados, Alstom Power Boilers puso «en peligro» la salud de los trabajadores de su planta de Lys-lez-Lannoy entre 1998 y 2001 por una «violación manifiestamente deliberada de una obligación de seguridad o de prudencia».

Además, estimaron que el antiguo director de esa planta de fabricación de calderas, Bernard Gómez, incurrió en una «infracción a la reglamentación general sobre la higiene y la seguridad».

Durante el proceso, la Fiscalía hizo hincapié en que desde 1997 se habían producido siete muertes entre los miembros de la plantilla de Lys-lez-Lannoy y afirmó que un 30% de los empleados sufren enfermedades profesionales.

Los abogados de la empresa, por su parte, pidieron la absolución con el argumento de que en el momento de los hechos no se tenían los conocimientos de que se dispone ahora sobre las consecuencias de trabajar con amianto.

Además, también insistieron en que no se puede decir que no se hiciera nada, ya que se aplicaba una política de prevención de riesgos.

La compañía había renunciado, en cualquier caso, a cuestionar la decisión tomada por la justicia en primera instancia para indemnizar a cada uno de los alrededor de 160 antiguos trabajadores de la planta con 10.000 euros. EFECOM ac/txr

Fuente: http://ve.invertia.com

Varias empresas buscan gente con discapacidad

Los departamentos de recursos humanos identifican problemas en el reclutamiento.

Nació con glaucoma, una atrofia en los ojos que combatió con dos operaciones. Pero a los 14 años, un accidente de tránsito desprendió sus retinas y perdió la vista. Mas quien hoy lo mira vestido de traje y con gafas, no se percata de su discapacidad (cumplió 39).

En el Ministerio de Gobierno, los compañeros de Lenin Uquillas lo saludan con un: buenos días, abogado. Coordina la consultoría legal: se encarga del análisis constitucional, elabora proyectos de ley, etc. Integra el 40% de las personas con discapacidad que cuentan con un empleo.

Y el 18% que accedió a la universidad frente a un 20%, con ningún tipo de instrucción, según el Consejo Nacional de Discapacidades (Conadis). â??Por una desconfianza natural, quien tiene todas las facultades cree que además de lo físico tenemos un mal mentalâ??.

La reflexión es de Uquillas, quien aprendió sobre orientación y braille en el Instituto para Ciegos del Ecuador, en Quito. Y luego se reintegró al colegio Pedro Carbo de Guaranda. Estudió Derecho en la U. Central, en donde copiaba las clases en braille, presentaba exámenes orales y trabajos a máquina con ayuda de su hermano.

Consiguió empleo gracias a Alejandro Carrión, su profesor de derecho societario, en 1986. Muchos no tienen esa oportunidad.
Desde este año, las empresas deben contar con un 2% de personal con capacidades diferentes.

No hay cifras sobre el número de empleados públicos con discapacidad. La Secretaría Nacional Técnica de Desarrollo de Recursos Humanos no tiene el informe. Los ministerios aún evalúan el tema internamente y no tienen datos.

Mientras, en el sector privado, algunos empresarios buscan la forma de cumplir con la Ley.

Patricio �lvarez, vicepresidente de Recursos Humanos y lo Administrativo del Banco Pichincha, está preocupado. Tienen 3 835 empleados y hasta el año pasado requerían 38 para contar con el 1% que exigía la Ley entonces.

Pero solo sumaron 34 personas. �lvarez recalca que se adelantaron a la Reforma al Código de Trabajo, del 2006. Y ha invertido en las personas con discapacidad.

Compraron el programa informático Jaws, en USD 2 500 hace cuatro años, para su asistente de mantenimiento invidente. Y colocaron un ascensor para evitar una fractura a dos hermanos, con la enfermedad de los Niños de Cristal, que verifican la forma y la firma de los cheques.

Este año necesitan 76 personas especiales. Y asegura que no pueden colocar a cualquiera, solo por cumplir la norma. Buscan personas que al menos inicien sus estudios universitarios y den un valor agregado a la entidad.

Han solicitado a varios de sus colaboradores que accedan al carné del Conadis. Pero muchos no han aceptado. Sienten que su autoestima se afectaría al reconocer su discapacidad y el trámite de calificación es largo. Entre ellos, alguien que perdió su ojo y otro, con prótesis en la cadera.

Jorge Izquierdo, a cargo del reclutamiento, dice que en el Conadis no hay una guía con los perfiles y los cargos según la discapacidad. Y comenta que varios aspirantes muestran altos grados de dependencia, no aceptan un horario de trabajo sin el permiso de su madre o preguntan si su hermano puede almorzar con ellos. Los problemas son mayores en las provincias.

â??Son pretextos. Los empresarios deben aplicar la responsabilidad social y acudir a los servicios de inserción laboral. Les reto a confirmar que el nivel de concentración de una persona con discapacidad es 35% más alto. Quien no oye no se mete en chismes y en silla de ruedas no se deja el cargo para ir por un cafecitoâ??, sostiene Xavier Torres. Ã?l preside las federaciones de y para la discapacidad.

Los perfiles

En la bolsa de empleo del Ministerio de Trabajo hay cinco abogados, cuatro periodistas, un arquitecto, dos trabajadores sociales, dos ingenieros civiles, cinco psicólogos, un sociólogo, 10 técnicos de sistemas, 3 médicos.

Con el incremento en los sueldos, desde este año la multa mensual para los empresarios es de USD 2 000 o 10 salarios.

En el Conadis le contactan con bolsas de empleo y federaciones como Nacional de Ciegos, que instala de forma gratuita el programa Jaws. Y le ofrecen traductor de lenguaje de señas y más guías para tratar a una persona especial (227 0 471 y 245 9243).

En el Banco Central hay 500 empleados, 33 con discapacidad, desde hace más de 20 años. 21 de ellos con deficiencia auditiva, en la Casa de la Moneda y tienen una traductora de lenguaje de señas.

Fuente: www.elcomercio.com

Ejercicio de simulación de incendio en el Hospital Puerta del Mar

C�DIZ. El Hospital Puerta del Mar realizó el miércoles una simulación de incendio en la Unidad de Gestión Clínica de Patología Mamaria. Un ejercicio que tuvo una duración aproximada de una hora, entre las cuatro y las cinco de la tarde. En la misma simulación intervino personal del área de hospitalización, en la quinta planta, pacientes ingresados, familiares, figurantes, los equipos de Primera y Segunda Intervención, personal de Prevención de Riesgos Laborales del centro y el comité de catástrofes del Puerta del Mar, entre otros.

La simulación comenzó en la habitación de una paciente inmovilizada, papel desempeñado por una figurante, donde se produce un fuego a consecuencia de una vela. Inicialmente actúa el personal que antes tiene conocimiento de los sucesos, el Equipo de Primera Intervención (EPI). Tras rescatar a la paciente de la habitación y avisar a centralita (que a su vez avisa al jefe de la guardia, al supervisor, al jefe de turno y al Equipo de Segunda Intervención), el EPI intenta apagar el fuego ficticio con un extintor. Ante la imposibilidad de controlar el incendio se decide la evacuación urgente de las habitaciones. A medida que se desalojan, una enfermera las revisa y las cierra con una almohada en el suelo. Por su parte, una auxiliar conduce a los evacuados a la zona administrativa y una vez allí se hace recuento de pacientes, familiares y figurantes. Posteriormente, la unidad se cierra, llega el Equipo de Segunda Intervención (ESI), el responsable de seguridad se hace cargo de la situación y se controla el fuego.

El ejercicio anterior se denomina evacuación horizontal urgente, pero la simulación también contempló una evacuación vertical programada, es decir, sacar a pacientes y a sus familiares del hospital por la escalera lateral, todo coordinado por una auxiliar, tras identificarlos, preparar su documentación clínica, medicación básica necesaria y ropa de abrigo.

Este ejercicio ha servido de experiencia y formación para los profesionales del Hospital Puerta del Mar y, además, será objeto de un análisis para acometer posibles mejoras y evitar fallos en un futuro.

Fuente: www.diariodecadiz.com

La exposición a las nanopartículas podría ser peligrosa para la salud

Las nanopartículas penetran en los pulmones, las microgrietas de la piel y probablemente en el cerebro mejor que las partículas de mayor tamaño, según un estudio del Instituto Nacional de Investigación y de Seguridad (INRS) de Francia, que llama a una mayor prevención en el ámbito laboral.

«Algunas partículas ultrafinas pueden ser más peligrosas que las partículas de mayor tamaño de la misma sustancia» y tienen «propiedades específicas» que de momento no se conocen bien, destacó el martes Benoît Hervé-Bazin, al presentar a la prensa los resultados de la investigación.

Cuando su tamaño desciende por debajo de las 20 millonésimas de milímetro (20 nanometros), las nanopartículas que se depositan en el sistema respiratorio no pueden ser digeridas por las células «macrófagas» que limpian los pulmones.

Compuestas de algunos centenares o miles de átomos aún experimentales, las nanopartículas empiezan a aplicarse en la cosmética, la medicina (nanoimplantes, nanodetección, destrucción de tumores, etc) y la industria, concretamente en los sectores automovilístico, electrónico y químico.

Además de los pulmones, los expertos del INRS han detectado también un «posible paso de de ciertas partículas al cerebro» por el nervio olfativo o el nervio trigémino, al nivel de la nariz.

«Las modalidades y la importancia de este paso dependen de la naturaleza de la partícula, de su superficie, su tamaño y su solubilidad», según la investigación del Instituto, titulada: «Las nanopartículas: ¿un asunto fundamental para la salud en el trabajo?».

Por su lado, investigadores estadounidenses han formulado una hipotética correlación entre la inhalación de estas nanopartículas y el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer.

En el ámbito de los productos cosméticos, los resultados de los estudios científicos son contradictorios. Por ejemplo, la penetración en la piel del dióxido de titanio utilizado en las cremas solares está probado según algunos, mientras que otros rechazan la tesis.

«Globalmente, parece posible una cierta penetración en la piel», dicen los investigadores, que precisan que «las flexiones cutáneas repetidas, normales en una actividad laboral, favorecen una profunda penetración».

Al tiempo que destaca la dificultad de medir el impacto de sustancias tan pequeñas, Hervé-Bazin recuerda los estragos causados por la exposición al amianto y considera que «sabemos ya bastante del tema como para permanecer inactivos».

Sin embargo, en muchos laboratorios siguen sin tomarse medidas de protección tan elementales como el ponerse una mascarilla.

Los ingresos mundiales generados por la nanotecnología, superiores a los 40.000 millones de euros en 2001, según la Comisión europea, podrían elevarse a más de 700.000 millones en 2008 y superar el billón de euros en 2015.

Fuente: www.eluniverso.com

Cómo medir el clima laboral para mejorar el trabajo

Lo que en el argot se define como «mala onda» en el trabajo produce efectos visibles en el desempeño y reduce la motivación. El «ambiente laboral» resulta de las relaciones de las personas y la organización. ¿Es posible modificarlo?

El «clima laboral» es un concepto relativamente nuevo en materia de psicología del trabajo. Las empresas comenzaron a preocuparse por su medición luego de conocerse su impacto sobre la motivación y el desempeño de los empleados y por tanto, sobre objetivos o resultados posibles.

«El clima laboral es un fenómeno colectivo; es el resultado de las relaciones que tienen las personas con la organización. Aunque se lo concibe en general como el conjunto de percepciones que las personas tienen del trabajo y todos los que trabajamos atribuimos significados al trabajo a partir de los cuales tomamos decisiones, es un fenómeno grupal», explicó a Infobae.com el Lic. Claudio Alonzo, profesor titular de la II Cátedra de Psicología del Trabajo, de la Facultad de Psicología de la UBA.

Es en las expresiones claras de malestar de los integrantes de la organización, en las manifestaciones sintomatológicas referidas al clima, que aparece «lo colectivo». Es a estas atmósferas de tensión que se las suele referir como «mala onda» y se la puede medir a nivel de toda la empresa o bien, en determinada área o departamento.

«Cuando se recurre a la medición del clima, se lo hace en general luego de la observación de emergentes que le preocupan a la organización, por ejemplo, índices crecientes de accidentes laborales, ausentismo, fallas en la producción –en el caso de industrias-, dificultades serias en la calidad de atención y servicio a clientes, presencia de conflictos entre áreas», aseguró.

Encuesta de clima

La metodología de medición es sencilla en su aplicación aunque no tanto en su armado. «Se realiza a través de encuestas pero no existe una estandarizada sino que las preguntas deben adecuarse al tipo de organización que la solicita», indicó Alonzo.

El objetivo es reflejar la relación de las personas y la organización, los grados de adhesión y rechazo, la satisfacción y el malestar, las necesidades, las expectativas y el nivel de cumplimiento de las mismas.

Abarca ciertas dimensiones irreductibles que se exploran con un cuestionario que tiene entre 70 y 90 preguntas. Son:

1) La relación entre la persona y el puesto o tarea. Se releva el grado de satisfacción con lo que se realiza, con los procesos en los que el empleado forma parte, el grado de ajuste de la tarea a las capacidades, el nivel de motivación.

Esto es «básicamente qué le gusta y qué no de lo que hace al empleado», señaló Alonzo y puntualizó que «puede ocurrir que haya equivocadas asignaciones de tareas, personas sobre o sub-valoradas, desajustes y falta de aprovechamiento de los recursos. Cuando la organización está muy apuntada al resultado, no se ve cómo las personas requieren ámbitos de desarrollo, lo que impacta negativamente».

2) La relación de las personas con la jerarquía.

3) La imagen que la gente tiene de la organización. La que tienen empleados y la que indican, tienen afuera.

4) Cuestiones generales sobre capacitación, seguridad, beneficios.

5) Salarios, compensaciones, premios, reconocimiento.

«Hay un problema estructural que tiene que ver con un fenómeno que es el del contrato psicológico. Las personas entran con un conjunto de expectativas a la organización. A veces, estas expectativas hacen que esa persona se desilusione muy rápidamente y perciba que sus capacidades no son debidamente utilizadas. Y las organizaciones no van chequeando ese contrato psicológico», señaló el experto.

La medición del clima «también es solicitada por Pymes» y la clave «está en la devolución de los resultados». Allí se obtienen informaciones del tipo «mi jefe no me escucha», «mi capacidad no es aprovechada», entre otras.

Lamentablemente no son los empleados quienes solicitan esta encuesta. «No lo harán tampoco todas las organizaciones. Utilizando el concepto de Elliot Jaques, existen las organizaciones paranoigénicas – que generan ambientes de desconfianza, hostilidad y amenaza permanente – y no medirán nunca ese clima o bien, filogénicas – orientadas a la gente, al desarrollo humano, donde las personas, lo procesal y lo tecnológico tienen un equilibrio», señaló Alonzo.

En la Argentina, «hay un promedio de adhesión a la medición de clima que va de 52% a 60% de las respuestas». Se observa que aquellas organizaciones que han aprovechado los indicadores de la encuesta, han obtenido mejores resultados.

Por Andrea Sambuccetti
Infobae.com

Fuente: www.infobae.com