Rodrigo A. tiene 23 años y atraviesa un momento dramático de su vida: evoluciona favorablemente después de una cirugía que le repuso el brazo izquierdo, literalmente arrancado por una…
Rodrigo A. tiene 23 años y atraviesa un momento dramático de su vida: evoluciona favorablemente después de una cirugía que le repuso el brazo izquierdo, literalmente arrancado por una máquina trituradora de troncos en un aserradero de Santo Tomé (Corrientes), de donde llegó en avión sanitario para que un equipo de médicos rosarinos intentara por más de ocho horas la complejísima operación.
«Lo más difícil es tomar la decisión, asumir el riesgo de esa cirugía», coincidieron los traumatólogos Miguel Slulitel y Miguel Angel Capomassi, dos de los cuatro médicos que se atrevieron a realizar el reimplante, inédito en Rosario por la zona donde el miembro fue amputado, directamente a la altura del tronco. El joven cursa un proceso clave, pero hasta ahora no presenta signos de infección ni de rechazo y se mantiene lúcido, como desde un principio: consciente de que todos, incluido él, vienen haciendo lo mejor para salvar su vida y su brazo. Ver más