Presos que trabajan en obras en construcción


Ever, esta semana en una obra del macrocentro. Asegura que la posibilidad de trabajar le â??cambió la vidaâ??. (Foto: C. Mutti Lovera)

«No veo la hora de empezar», asegura uno de los 250 internos de la alcaidía de la Jefatura rosarina que en breve será protagonista de una experiencia única en la ciudad: comenzar a trabajar en una empresa constructora antes de cumplir la condena. Es la primera vez que desde el Servicio Penitenciario de Santa Fe se realiza un convenio con una compañía que permite a los internos salir a trabajar fuera de la cárcel y cobrar un sueldo.

La constructora ya probó con éxito la experiencia en Paraná (Entre Ríos), donde contrató a cerca de 35 internos. La oportunidad de inserción laboral es única para los detenidos. Sobre todo porque les permite conseguir un empleo seguro con la posibilidad de seguir trabajando allí cuando estén en libertad, algo que detrás de las rejas parece imposible.

«Mi papá fue el que tuvo la idea de contratar presos», cuenta el dueño de la empresa, y la experiencia le trajo buenos resultados. «El hombre de mayor confianza en una de las obras de Paraná es un muchacho que estuvo en prisión», asegura el empresario. Ahora están replicando la experiencia en Rosario, donde ya empezó a trabajar un interno y en los próximos días lo hará otro.

El director general del Servicio Penitenciario, Mariano Bufarini, explicó que «los internos que se contratan deben cumplir ciertos requisitos: tener la mitad de la condena cumplida, una buena conducta y la autorización judicial para poder trabajar afuera». Además se les hace un control psicológico y asistencial desde la unidad.

En todos los casos, estos internos salen de la cárcel los fines de semana y ahora cada día se levantan temprano para a las siete estar en la puerta del edificio en construcción y regresar a las 20 al penal.

El dueño de la constructora reconoce que los internos «se preocupan mucho por cuidar el puesto y volver al penal. Saben que al cumplir la condena pueden seguir trabajando aquí», dice. También tienen en claro que de no volver al penal perderán inmediatamente el trabajo. La experiencia es una luz de esperanza para los que llevan años y años de condena intentando superarse en el oscuro mundo que se esconde detrás de las rejas.

Fuente: www.lacapital.com.ar

Investigan la muerte de un obrero de la construcción

Se trata de un hombre de 49 años, quien falleció poco después de precipitarse desde un piso 13. La Justicia investiga el hecho y la obra fue clausurada por no observar las normativas de seguridad exigidas por la ley.


El edificio en construcción donde ocurrió el hecho desde dos ángulos

Un obrero de la construcción murió ayer como consecuencia de las graves heridas que sufrió al caer desde el piso 13 de un edificio en construcción ubicado sobre bulevar España 545.

El luctuoso episodio ocurrió ayer a la mañana, alrededor de las 8.30, por causas que son motivo de una investigación judicial, ya que existen al menos dos hipótesis de lo ocurrido.

El trabajador, identificado como Daniel Mansilla, de 49 años, fue trasladado hasta el Hospital Regional Pasteur, en muy grave estado, por los Bomberos Voluntarios.

Pocos minutos después de arribar al centro de salud dejó de existir.

Mansilla residía en barrio Belgrano de esta ciudad, aunque era oriundo de la provincia de Formosa.

No se explican

Los compañeros de trabajo de Mansilla no logran explicarse cómo cayó el albañil.

Según manifestaron, llegó temprano en la mañana, no saludó, tomó el ascensor y subió. Trabó el ascensor allá arriba y estuvo un buen rato, aunque al parecer, no trabajó. Luego, cayó», indicaron los trabajadores.

Más tarde, los inspectores tanto provinciales como de la Unión Obreros de la Construcción de la República Argentina, coincidieron en que «el hombre estaba dando el revoque fino en las paredes interiores de uno de los departamentos, por lo que resulta difícil entender cómo fue que se cayó», indicaron.

Obra clausurada

Sin embargo, no se descarta la hipótesis de que se haya tratado de un accidente, aunque varias versiones indicaron que el trabajador se habría arrojado al vacío.

La obra, que no contaba con las medidas de seguridad que exige la ley, fue clausurada preventivamente hasta tanto se construya el vallado de contención y se tomen alguna otras medidas.

Así lo manifestó a EL DIARIO el arquitecto Jorge Ruiz, especialista en seguridad de la construcción e inspector provincial de obras.

Por otra parte, Ruiz señaló que «en Villa María no se da a basto para inspeccionar todas las obras en construcción que hay y la gran mayoría está en infracción respecto de las medidas de seguridad. Y además, no hay cultura por parte de los constructores en este sentido», explicó Ruiz.

Fuente: http://eldiariocba.com.ar

Seguridad laboral: repudian agresión a un inspector en una obra en construcción

Rosario. Desde el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la provincia repudiaron las agresiones verbales y amenazas que recibió un inspector de esa cartera mientras realizaba un operativo de inspección en la obra en construcción ubicada en Suipacha 885.

Funcionarios de la división Legales de la Coordinación de Salud y Seguridad de la Regional Rosario del Ministerio de Trabajo, precisaron que el inspector fue agredido por el encargado de obra de la empresa Parome SRL, Néstor Maristán, luego de que se constataran diversas irregularidades en materia de seguridad laboral, y dictaminara la inmediata paralización de las actividades.

En el operativo de inspección se advirtieron, entre otras faltas: ausencia de barandas perimetrales, accesos inseguros (escalera de mano sin amarrar y de largo deficiente, falta de puerta en acceso de montacargas), así como operarios realizando tareas a 20 centímetros del borde del encofrado (6º piso) sin contar con arnés de seguridad y sin barandas perimetrales.

Además, falta de iluminación adecuada (en escalera de estructura) y riesgo de electrocución (falta de puesta a tierra al motor del montacargas y falta de protección en el sistema de transmisión de la polea del montacargas). Por este motivo, se labró la correspondiente acta de inspección (Nº 13172) y posterior suspensión de la obra (acta de suspensión Nº 2176).

Condiciones laborales riesgosas

En la ocasión, el funcionario comunicó la paralización de las tareas hasta tanto no se regularizaran las condiciones de salud y seguridad. En esta instancia, Maristán solicitó «un tiempo» para solucionar las falencias, considerando que el lugar se encontraba en «condiciones adecuadas». Ante la negativa, el responsable de obra insultó al inspector e instó al personal a agredirlo físicamente.

EL hecho fue repudiado por las autoridades de Trabajo de la provincia, considerando que este tipo de acontecimientos «revela el modo en que una parte de los responsables de las obras continúa exponiendo a sus empleados a condiciones de trabajo altamente riesgosas, al incumplir sus obligaciones en materia de seguridad y salud laboral».

La empresa Parome SRL cuenta con diversas inspecciones en diferentes domicilios según los registros del Ministerio de Trabajo de la provincia: diciembre de 2007, inspección y suspensión en Jujuy 2110; mayo de 2008, inspección y suspensión en Jujuy 2452.

Fuente: www.lacapital.com.ar

Muerte de un obrero en 2005: procesan a un ingeniero y a dos capataces

Rosario- La Justicia procesó a un ingeniero de seguridad y a dos capataces de una obra en construcción céntrica donde en junio de 2005 falleció un obrero de 20 años tras caer desde un 14º piso.


Jorge Madero tenía 20 años y cayó desde un piso 14 la tarde del 6 de junio de 2005. (Fotos: A. Celoria)

El 6 de junio de 2005, Jorge Madero, de 20 y ayudante de carpintería, se encontraba realizando el encofrado en el piso 14 de una obra en construcción en Tucumán y avenida Belgrano.

El muchacho se precipitó por el hueco de un andamio tras realizar un movimiento en falso. En su caída golpeó contra un puente para el traslado de materiales ubicado en la planta baja del edificio y quedó tendido en la calle.

En su momento, compañeros de trabajo del joven señalaron que el obrero carecía de arneses y casco de protección y que la caída se produjo mientras realizaban tareas de hormigonado en la obra. También dijeron que los responsables de la construcción les ordenaron continuar con los trabajos, aún con el cuerpo yaciendo en el piso, hasta terminar con el hormigón preparado, según hizo constar La Capital.

En su resolución, el juez Correccional de la 3ª Nominación, Horacio Benvenuto, dictó el procesamiento por el delito de homicidio culposo. El fallo de los dos capataces – Raúl Alberto R., de 51 años, y Marcelo Adrián L., de 28 – está firme mientras que el profesional –Ricardo Daniel A, de 51 años – apeló la medida.

En tanto, la madre de Madero presentó una demanda civil contra la empresa constructora Capobianco S.A., que realizó la obra.

Fuente: www.lacapital.com.ar

Otra muerte evitable

El albañil, de 41 años, había caído el lunes y agonizó cinco días. Tenía cuatro hijos. La obra de la que cayó, de Alvear 1154, fue clausurada dos veces por falencias en la seguridad.


En Alvear 1154 levantan el jardín de infantes Dante Alighieri.

Fueron cinco días de agonía. Miguel Sequeira, el obrero de la construcción que cayó el lunes pasado del primer piso de una obra en construcción en Alvear 1154 falleció el sábado por la noche, en el sanatorio Laprida. El hombre, de 41 años y con cuatro hijos, trabajaba en la construcción del jardín de infantes Asociación Cultural Dante Alighieri, en una obra que fue clausurada dos veces por el Ministerio de Trabajo de la provincia a raíz de falencias de seguridad. No es sólo un número, sino una persona. Otra más. El sexto albañil que muere este año en un accidente de trabajo.

«Es una tragedia brutal, esto es homicidio. Con dolo y abandono de persona por parte de los empresarios. No existen palabras en el diccionario para nombrar esta tragedia que estamos viviendo», dijo indignado Narciso Cantero, de la Agrupación Manos a la Obra, quien conocía a Sequeira porque había trabajado en una empresa constructora con él.

Por su parte, el secretario general de la seccional Rosario de la UOCRA, Julio Palma, cargó contra los subcontratistas y confió en los efectos de los Comités Mixtos de Higiene y Seguridad, sancionados el jueves pasado en la Legislatura provincial. También indicó que la semana pasada realizaron una presentación judicial en los Tribunales para pedir prisión efectiva a quienes sean encontrados responsables de los accidentes laborales fatales. «Deben ir a la cárcel, como cualquier delincuente», indicó.

Sequeira cayó de unos cuatro metros de altura el lunes pasado, al mediodía, y sufrió un fuerte politraumatismo de cráneo. Como no contaba con los mínimos elementos de protección, cayó sobre unos tacos de madera que le ocasionaron los golpes y escoriaciones. Tampoco estaba en regla la bandeja de protección obligatoria en las obras, que hubiera actuado como una contención.

«Nunca se vieron tantos accidentes de trabajo como ahora, pero tampoco existía este auge de la construcción. En este momento hay 2.500 obras en construcción, y la Municipalidad entrega los permisos de edificación sin mirar demasiado. Muchos constructores sólo tienen en cuenta la rentabilidad. Entonces, el comitente de la obra contrata a una empresa, que subcontrata a otra, y ésta a un tercero. Así, el último ofreció la mano de obra es muy barata, y no le alcanza para cumplir con los requisitos, no sólo de seguridad, sino también con los aportes», describió la cadena de informalidad que provoca los accidentes.

Palma se quejó también de la complicidad del Estado, al pedir que «las multas duelan, porque no puede ser que se arreglen con monedas, en un bar». El dirigente se refirió así al pago de coimas para la desaparición de expedientes que dejó al desnudo la detención del abogado Daniel Gazzera, del ministerio de Trabajo. «Estamos trabajando para combatir todo eso, con el ministerio y las cámaras empresarias de la construcción», prometió.

Fuente: www.pagina12.com.ar