Ni la Uocra ni el Ministerio de Trabajo tienen injerencia en obras que encaran personas particulares en sus viviendas. La Municipalidad sólo debe controlar que tengan el permiso correspondiente. Para evitar accidentes, es fundamental que toda remodelación esté dirigida por un profesional.
El trágico derrumbe ocurrido ayer por la mañana en una vivienda de Villa María Selva, donde perdió la vida un obrero de la construcción y otro resultó gravemente herido, generó conmoción. Mirta Blaskow, directora ejecutiva del Programa de Obras Urbanas de la Municipalidad, señaló sobre el hecho en particular que la obra “contaba con permiso” y que la causa del derrumbe, que deberá investigar la Justicia, podría haber sido “por impericia de la gente que estaba trabajando”.
De acuerdo con la información brindada por la funcionaria, entre 2010 y 2011 el municipio otorgó 1.431 permisos de obra y 180 permisos de demolición, todos solicitados por profesionales de la construcción. Al mismo tiempo que manifestó que los controles que se realizan desde la Municipalidad cuando un particular decide realizar una ampliación o una remodelación en su vivienda se limitan a verificar que cuente con el permiso correspondiente, indicó que muchos de los accidentes que ocurren en esas obras obedecen a que “hay profesionales que se prestan a firmar los papeles sin saber, en muchos casos, los detalles”. Sobre esta problemática, el municipio se encuentra haciendo un trabajo de concientización.