Incendio fatal en planta de etileno de Mitsubishi

TOKIO (Reuters) – Un incendio provocó la muerte de dos trabajadores en la mayor planta de etileno de Japón el viernes, lo cual forzó a Mitsubishi Chemical Corp a cerrar una de sus dos unidades en la fábrica de Kashima, cerca de Tokio. Otros dos trabajadores permanecen desaparecidos.

La principal firma de petroquímicos japonesa dijo que iba a investigar la causa del incendio en la planta, que representa más de un décimo de la producción nacional de etileno, el eje principal de la industria petroquímica.

El viernes a la noche, los bomberos habían controlado el incendio, que se inició cerca de un horno.

La televisión mostro imágenes de la planta ennegrecida con algunas llamas aún encendidas.

Después de horas de buscar a los cuatro empleados desaparecidos, el departamento de bomberos recuperó dos cuerpos. Los cuatro trabajadores eran empleados de otras dos compañías.

No quedó inmediatamente claro por cuánto tiempo estará cerrada la unidad número 2, que produce 516.000 toneladas por año.

«La planta de etileno número 1 está operando normalmente. Por eso no sabemos qué tipo de impacto tendrá al final, pero creo que esperamos algún tipo de impacto,» dijo un empleado de Mitsubishi Chemical.

La unidad número 1 de la planta de Kashima puede producir hasta 410.000 toneladas de etileno por año.

(Reporte de Chikafumi Hodo, Chisa Fujioka, Yoko Kubota, Osamu Tsukimori, Nathan Layne y George Nishiyama; reporte adicional de Angela Moon en Seúl)

Fuente: http://lta.reuters.com

Nuevo incidente en Botnia deja cuatro obreros heridos

Los trabajadores de la planta de celulosa debieron ser internados durante dos días tras sufrir lesiones en los ojos y en las vías respiratorias. La firma produce su segundo lote de pasta de celulosa.

Cuatro trabajadores de mantenimiento de Botnia fueron hospitalizados con irritación en los ojos y vías respiratorias a consecuencia de haber entrado en contacto con dióxido de cloro, y recibieron el alta tras permanecer entre 12 y 36 horas en observación.

Así lo confirmó a la agencia la gerenta de Comunicaciones de la empresa, Florencia Herrera, quien puntualizó que el hecho, que ocurrió el martes último aunque recién trascendió hoy, «no fue un accidente ni un error de manipulación» por parte de los trabajadores.

«No fue un accidente. Estaban en la torre de enfriamiento donde se le pone dióxido de cloro al agua y lo que hicieron fue aspirar.

Estaban en un lugar donde no se puede estar en ese momento», detalló Herrera.

La representante de Botnia enfatizó que los trabajadores – pertenecientes a la firma Andritz, subcontratista de la pastera -«estaban bien» luego del episodio, aunque señaló que «por precaución» fueron llevados al hospital.

El dióxido de cloro se utiliza en el tratamiento de agua y se dosifica igual que en la piscina de una casa particular, explicó Herrera, quien remarcó que «hay momentos y momentos en los cuales se puede estar en esa zona» durante el proceso.

Los operarios fueron llevados «por precaución a un sanatorio, y se resolvió dejarlos en observación por 12 horas, menos a uno de ellos, que quedó 24 horas m s pues tenía antecedentes respiratorios», explicó la funcionaria, quien resaltó que «todos fueron dados de alta».

El episodio conocido este sábado se sumó al del 14 de agosto último, cuando 12 obreros debieron recibir atención médica tras protagonizar un accidente con sulfuro de sodio.

Asimismo, en octubre pasado, luego de la inauguración de la fábrica, los habitantes de Fray Bentos sintieron un fuerte olor que en varios casos les provocó nauseas, lo que motivó un pedido de disculpas de la empresa.

Finalmente, el 21 de noviembre último, 4 alumnas y una maestra de una escuela denunciaron haber sido afectadas por el olor que emanaba de la planta.

Esos accidentes serían incorporados por la Argentina como «agravantes» en la r‚plica que el país presentar en enero ante la Corte Internacional de Justicia, con sede en La Haya, tribunal que dirime el pleito bilateral por la presunta violación al Tratado del Río Uruguay por parte de Montevideo.

Fuente: www.infobae.com

El becario que quedó ciego en una explosión dice que estaba "para todo"

Un becario del Instituto de la Grasa de Sevilla, que quedó ciego en una explosión cuando trasladaba productos peligrosos en una mudanza de laboratorios, dijo ayer al juez que hizo el traslado porque le pareció que ésa era «su misión», que estaba allí «para todo» y que todo era «una ocasión para aprender». El becario declaró ayer como testigo en el juicio contra la ex directora, el ex gerente y otros dos empleados del Instituto de la Grasa, imputados por presuntos delitos contra los derechos de los trabajadores y lesiones por la explosión ocurrida el 6 de junio de 2001.

El joven, que sufre una ceguera irreversible, ha declarado que le pidió efectuar el traslado la auxiliar de laboratorio procesada F.L. y que obedeció, pese a que él es licenciado en Bioquímica. «Yo era el becario y me pareció que ésa era mi misión, que yo estaba allí para todo y, al ser el más joven, era lógico que hiciera el trabajo que requería esfuerzo físico».

La declaración de este joven dejó a la luz otras deficiencias en seguridad como la carencia en el laboratorio de pantallas faciales, gafas y mascarillas.

Fuente: www.diariodesevilla.com

Incendio en refinería en Minatitlán, Veracruz; dos lesionados

El siniestro ocurrido en el incinerador CF-1404 de la refinería Lázaro Cárdenas fue controlado por personal de contraincendios de Pemex.
Coatzacoalcos, Ver. Dos trabajadores sufrieron quemaduras de primer y segundo grado durante un incendio en una planta recuperadora de azufre de la refinería Lázaro Cárdenas, en el municipio de Minatitlán, al sur de Veracruz, informó este miércoles Georgina Saavedera Cruz, vocera de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la región.

Los obreros Rodrigo Antonio Zanoteli Vázquez y Heriberto Domínguez García, convalecen en el hospital regional de Pemex, a causa de las quemaduras que sufrieron en el ocho por ciento de su cuerpo.

Saavedra Cruz explicó que el incendio ocurrió ayer martes en el incinerador CF-1404 y fue controlado por personal de contraincendios de la paraestatal.

El director de la Unidad de Protección Civil de Minatitlán, Guillermo Hernández Urbina, acusó de cerrazón a Pemex por no informar a la comunidad minatitleca cada que ocurre un percance en la refinería ubicada en pleno de la ciudad.

Jesús Lastra, corresponsal

Fuente: www.jornada.unam.mx

Explosión en Río IV: la Justicia determinó el origen del hexano

RIO CUARTO, (NA). – La investigación que se realizaba en la Universidad Nacional de Río Cuarto, al momento de la trágica explosión que ya dejó dos muertos era financiada por una empresa argentina con capitales belgas, que les proveía los materiales necesarios, entre ellos el hexano, la sustancia detonante.

A días de la tragedia en la planta piloto de Ingeniería de la UNRC, Carlos Juni, presidente de la firma De Smet SAIC, reveló datos salientes de la relación entre ambos organismos. De Smet es la principal proveedora nacional de todas las industrias aceiteras y de biodiésel de la Argentina y trabaja desde hace al menos diez años con la Universidad.

«Nuestra empresa se dedica a la construcción de plantas de extracción de aceites y la Universidad de Río Cuarto es la institución académica más importante, holgadamente, con reconocimiento internacional en materia de oleaginosas», explicó Juni. El directivo indicó que el miércoles pasado, los investigadores se encontraban realizando una serie de «ensayos que tenían por objeto mejorar la eficiencia de los procesos de extracción de aceites». Sin embargo, Juni aclaró que la empresa y la Fundación de la Universidad no tenían «ningún acuerdo» firmado, a pesar de que existían varios borradores, por lo que «se empezó a trabajar como muchas veces sucede en estos casos en que los procedimientos internos son más burocráticos y no acompañan los tiempos de los investigadores», dijo.

Para la realización del proyecto, la empresa envió alrededor de 13 tambores cargados de hexano, uno de los cuales tuvo una pérdida y ocasionó la explosión, que por ahora dejó dos muertos.

Investigación

La Justicia federal logró determinar la ruta que realizó la peligrosa sustancia hexano, por lo que ahora deberá establecer si hubo negligencia por parte de los investigadores en el manejo del tambor que provocó la pérdida y posterior explosión en la Universidad de Río Cuarto.

Según fuentes de la pesquisa, ya se sabe quién compró el hexano, qué empresa lo proveyó, cómo llegó a Río Cuarto y desde cuándo estaba instalado en la planta piloto de Ingeniería donde ocurrió la tragedia.

En el Rectorado no hay información oficial sobre el solvente ni sobre la investigación porque el trabajo con la empresa De Smet no había sido oficializado, estando la investigación a cargo del Ing. Miguel Mattea.

«La compra de hexano no es delito, adquirirlo y llevarlo no es delito. El tema es si se trabajó con ese solvente en lugares que no corresponden», explicó Carlos Ochoa, secretario penal del Juzgado Federal. Según el diario riocuartense El Puntal, el problema está en tratar de establecer cómo se dio la manipulación del hexano, si se trabajó con las normas de seguridad establecidas y si la Universidad tenía una planta acondicionada para almacenar 2.600 litros de la sustancia explosiva.

Fuente: www.laopinion-rafaela.com.ar

La empresa De Smet financiaba el proyecto

Río Cuarto.- El proyecto de investigación que se realizaba en la Universidad de Río Cuarto al momento de la trágica explosión era financiado por una empresa argentina con capitales belgas, que proveía a los investigadores los materiales necesarios, entre ellos el hexano, la sustancia detonante de la explosión.

Carlos Juni, presidente de la firma De Smet, reveló datos salientes de la relación entre ambos organismos. De Smet es la principal proveedora nacional de todas las industrias aceiteras y de biodiesel de la Argentina y trabaja desde hace al menos 10 años con la Universidad.

â??Nuestra empresa se dedica a la construcción de plantas de extracción de aceites y la Universidad de Río Cuarto es la institución académica más importante, holgadamente, con reconocimiento internacional en materia de oleaginosasâ??, explicó.

El directivo indicó que los investigadores realizaban una serie de ensayos para mejorar la eficiencia de los procesos de extracción de aceites.
Para la realización del proyecto, la empresa envió alrededor de 13 tambores cargados de hexano, uno de los cuales tuvo una pérdida y ocasionó la explosión.

Por el trabajo, De Smet iba a abonar a la Universidad alrededor de $ 10.000. (NA)

Fuente: www.lagaceta.com.ar