Un español exigía más de €2 millones de resarcimiento a diferentes aseguradoras. Las sospechas llevaron a descubrir el intento de fraude
«Había varias cosas que no cuadraban. El particular aseguró que la sección de la mano se había producido cuando su coche se salió de la carretera y cayó por un terraplén, pero comprobamos que los ángulos de giro y la velocidad teórica no encajaban con esa versión», expresó José Luis Nieto, presidente de Gesterec, una firma especializada en la reconstrucción de siniestros, respecto del caso que tuvo lugar en España.
«Además, el corte de la mano era demasiado limpio, sin afectar al hueso, algo casi imposible en un accidente de tráfico», amplió el profesional sobre la demanda iniciada por un particular del que no se brindó su nombre, en una época en ese país que las demandas fraudulentas avanzan casi a la misma velocidad que el alza en el desempleo. Ver más