El accidente ocurrió en Guaymallén, cuando el hombre recibió el golpe de un caño de gran porte, que le provocó heridas mortales.
Un operario de 52 años murió hoy, tras caerle encima un caño de perforación de agua de una tonelada de peso y de 12 metros de largo, cuando realizaba tareas junto a otros compañeros sobre el lateral de una calle, en la localidad mendocina de Guaymallén, informaron fuentes policiales.
De acuerdo con medios locales, el titular de la Policía, Suprianto, confirmó el número de decesos.
Autoridades de Indonesia informaron este martes que ascendió a 18 la cifra de víctimas por una explosión registrada el pasado domingo en una planta de níquel mientras que decenas de heridos permanecen bajo atención médica.
Un paredón de unos 20 metros de largo que estaba en proceso de demolición en una obra en construcción de Tucumán y Santiago de la ciudad de Rosario, se derrumbó esta mañana de viernes sobre la calle y al caer, cortó la red de alumbrado público y aplastó un auto estacionado.
El accidente se registró cerca de las 10, cuando una grúa de demolición que trabajaba en una obra en construcción ubicada en Tucumán al 2400, comenzó a destruir un muro que colapsó hacia la vereda y la calle.
En un dramático accidente en Güemes 2651, entre Callao y Rodríguez, en el macrocentro de Rosario, un joven electricista de aproximadamente 30 años fue protagonista de un impactante incidente mientras realizaba labores en un antiguo bar en proceso de desmantelamiento. El trabajador, quien se encontraba realizando tareas en un sistema de aire acondicionado, sufrió una descargaeléctrica que lo dejó sin respirar durante algunos segundos.
Un estudio muestra que 756.000 niños de entre 5 a 17 años ejercieron en 2022 actividades incluidas en una lista del Gobierno que enumera las peores formas de trabajo infantil en el país.
El trabajo infantil aumentó en Brasil un 7 % desde 2019 alcanzando casi a 1,9 millones niños y adolescentes de entre 5 y 17 años en 2022, según una encuesta divulgada este miércoles por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Las llamas, provocadas por una máquina de fuego frío, no pudieron controlarse hasta pasadas dos horas y media desde que arrancó el operativo formado por una decena de vehículos y una treintena de bomberos
El fuego que arrasó las discotecas Teatre y Fonda Milagros en la madrugada del pasado 1 de octubre fue cogiendo fuerza lentamente, pero se convirtió en una trampa mortal. El incendio, que terminó en una tragedia que costó la vida a trece personas, “tuvo que producirse mucho antes de ser detectado, por el estado de las llamas que se apreciaban y la velocidad con la que se propagó por toda la discoteca y establecimientos cercanos”, desvela un informe de 77 páginas del grupo de delitos contra las personas (UDEV) de la Policía Nacional.