Temen una nueva explosión por el incendio en Gran Bretaña

Los bomberos ya habían controlado el fuego en la mitad de los tanques incendiados, pero tuvieron que interrumpir las tareas. El desastre se inició ayer por la madrugada en un predio operado por las empresas Total y Texaco.


HUMO NEGRO. Es a 40 kilómetros de Londres. El fuego se inició ayer por la madrugada tras una serie de explosiones. (Foto: AP)

Los bomberos que hoy intentaban apagar el gigantesco incendio en un depósito de combustible cerca de Londres debieron hacer una pausa en sus operaciones debido al riesgo de una nueva explosión. «Interrumpimos las tareas ante la posibilidad de que estalle un tanque que podría contener un carburante muy volátil», afirmó el jefe de bomberos del condado de Hertfordshire, Roy Wilsher.

Los trabajos para sofocar el fuego que arde desde la madrugada de ayer en el centro de Buncefield empezaron esta mañana y fueron suspendidas esta tarde. Esta interrupción representa un «revés temporal» en la lucha contra las llamas, señaló Wilsher, aunque aclaró que espera que los bomberos logren sofocar el fuego durante la próxima madrugada.

El jefe de bomberos aseguró que hasta el momento de la interrupción, las tareas para sofocar el incendio habían dado buenos resultados. «El fuego de doce de los veinte tanques ya fue sofocado», precisó Wilsher, quien destacó que «este es el mayor incendio de este tipo en Gran Bretaña y en Europa», desde fines de la Segunda Guerra Mundial.

El incendio se desató en un predio de Buncefield, cercano a Hemel Hempstead, a unos 40 kilómetros de Londres, que operan las compañías Total y Texaco y forzó a que fueran evacuadas 2.000 personas. Como consecuencia del siniestro se registraron 43 heridos, dos de ellos de gravedad.

Apenas comenzó el fuego, el viceprimer ministro británico John Prescott visitó el lugar y ofreció ayuda del gobierno, pero los servicios de seguridad, los bomberos y los hospitales consideraron que no se necesitaban refuerzos.

Hasta el momento no hay ninguna evidencia que indique que pueda haberse tratado de un ataque terrorista. «No hay nada que indique otra cosa que un accidente. Pero estamos abiertos a todas las posibilidades», dijo ayer Frank Whiteley, jefe de la Policía de Herfordshire, en un intento de calmar a los británicos que acababan de despertar y temían ser víctimas de otro ataque terrorista.

Al menos la mitad de la planta fue destruida. Las llamas alcanzaron los 70 metros y una inmensa nube negra se extendió desde el norte hacia el sur del país. El depósito contiene liquido inflamable altamente volátil y combustible de aviación, que provee a los aeropuertos de Heathtrow y Lutton, y a otros regiones del país con instalaciones subterráneas. La BBC informó que la explosión se escuchó aun en el norte de Francia y Holanda.

Fuente: Diario Clarin

Extinción de Incendios: Plan de Revisión de Equipos


Fuente foto: semael-epi.com

En la organización de un plan de prevención y protección contra incendios en un centro de trabajo se debe tener en cuenta que es tan importante la elección de los equipos de protección más adecuados, como un buen programa de mantenimiento con las revisiones necesarias, además obviamente, de la adecuada formación teórico-práctica del personal.

Las instalaciones y los elementos de lucha contra incendios están ideados para actuar cuando ocurra la emergencia, pero lo más probable es que estén largos periodos sin que tengan que intervenir. Además, hasta que no se utilizan, no se puede asegurar totalmente su eficacia. Se debe considerar también que el exceso de confianza en una instalación, que por desconocimiento no esté en condiciones seguras de actuación, acrecienta el riesgo existente. Todo esto conduce a la necesidad de tener un buen programa de mantenimiento de dichas instalaciones y elementos de lucha contra incendios, que incluya la descripción de las pruebas a realizar y la frecuencia correspondiente. En la fase de la ingeniería básica de las mencionadas instalaciones y para la buena elección de los medios contra incendios se deberán seguir unos criterios prácticos basados en las reglamentaciones existentes y en las experiencias de los profesionales de la lucha contra incendios.

Fuente: Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo – Min. de Trabajo y Asuntos Sociales (España)

Recibido a tarves de «E-Newsletter Seguridad Hoy Express»- volumen I – número 23, diciembre 2005, de Coastal Training Technologies Corp.

La peor catástrofe en Europa desde la Segunda Guerra Mundial

Los bomberos tardarán días en apagar el incendio desatado ayer en un centro de combustible en Londres. Se usarán 250.000 litros de espuma mezclados con agua. Imágenes impactantes.

Los bomberos continúan hoy luchando para apagar el espectacular incendio declarado el domingo tras una serie de explosiones en el centro de combustible de Buncefield, al norte de Londres, que dejaron 43 heridos, dos de ellos graves.

Los bomberos tratan de sofocar el incendio, el peor ocurrido en el Reino Unido desde la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), con unos 250.000 litros de espuma mezclados con 25.000 litros de agua que se van a verter sobre el lugar del siniestro.

Según la agencia EFE, esa aparatosa operación, que se prolongará esta mañana durante cuatro horas, debería haber comenzado la pasada medianoche, aunque se aplazó por temor a la falta de suministro de agua. «Sabremos a mediodía de hoy si nuestro plan va a ser efectivo o no», afirmó Roy Wilsher, el jefe de bomberos del condado de Hertfordshire, al norte de la capital británica.

Los expertos pronostican que los bomberos pueden tardar aún varios días en sofocar completamente el gigantesco incendio, que lanzó al cielo bolas de fuego y un denso humo negro.

El depósito de combustible sigue en llamas, mientras una gigantesca nube de humo negro se ha propagado por gran parte del sur de Inglaterra.

La Policía recomendó hoy a los residentes de la zona que permanezcan en sus casas con las ventanas y las puertas cerradas.

El fuego, cuyas causa aún se desconoce, empezó a primera hora de la mañana del domingo y obligó a evacuar a unas 2.000 personas que viven cerca del lugar.

Aunque los expertos aseguran que el humo es, en el peor de los casos, de muy baja toxicidad, el hecho de que se haya recomendado a los vecinos de las localidades próximas encerrarse en sus casas y no abrir puertas ni ventanas ha provocado cierta inquietud.

El humo es irritante y puede causar escozor en los ojos y en algunos casos náuseas, si bien las personas con problemas respiratorios son, en cualquier, caso las más expuestas ya que pueden sufrir ataques de asma, según las autoridades sanitarias.

Veinte depósitos de combustible, cada uno con capacidad para 13,5 millones de litros, se han visto afectados por las llamas.

Las instalaciones de Buncefield, copropiedad de los gigantes petroleros Texaco y Total, suministran combustible a los principales aeropuertos que sirven a la capital británica, entre ellos el de Luton, a sólo 16 kilómetros, y el más lejano de Heathrow.

El incendio no afectó a los vuelos programados este domingo en el aeropuerto de Luton, aunque los aterrizajes de Heathrow sufrieron algunos retrasos por culpa del humo.

Fuente: www.infobae.com

Explotó un depósito de combustible cerca de Londres: 43 heridos y 2.000 evacuados

La Policía británica asegura que fue un accidente. El lugar el un centro de distribución para los principales aeropuertos de Inglaterra y está a tan sólo 32 kilómetros de la capital.


Fuente de la imagen: Diario La Capital

Uno de los centros distribución de combustible más importantes del Reino Unido, que sirve a los principales aeropuertos de Londres fue escenario esta mañana de una serie de explosiones – de origen desconocido – que causaron un enorme incendio en la zona, con llamas de hasta veinte metros, y varios heridos. El siniestro dejó 43 personas heridas y más de 2.000 evacuados, según las últimas informaciones de la policía.

Aún se desconoce la causa exacta del hecho, pero la policía parte de la hipótesis de un accidente y ya se encargó de desmentir algunas versiones que circulaban sobre un supuesto avión visto sobrevolando a baja altura.

Dos de los heridos se encuentran hospitalizadas en estado grave, según las mismas fuentes, lo que parece casi un milagro dado la espectacularidad del incendio, que dio origen a enormes columnas de humo que, empujadas por el viento, se extienden en forma de nube por el sur del país.

La noticia de la explosión en uno de los más importantes centros de distribución de combustible del Reino Unido hizo que muchos ciudadanos se lanzaran a la calle inmediatamente y se dirigieran a las estaciones de servicio, lo que causó el caos de tránsito en la zona.

Las autoridades se han apresurado a asegurar a la población que el suministro de gasolina está garantizado porque hay otros centros que pueden tomar el relevo en caso necesario.

En cuanto a las consecuencias para la salud de la nube de humo, la responsable de sanidad del condado de Herfordshire, Jane Halpin, señaló que puede afectar a personas con asma y otros problemas respiratorios.

Al menos 2.000 personas que viven en las proximidades del lugar del siniestro fueron evacuadas de sus casas y serán albergadas en centros deportivos, refugios del Ejército de Salvación y viviendas de familiares y amigos.

Las autoridades pidieron a los vecinos de las localidades próximas que cierren puertas y ventanas y permanezcan en sus casas, y han recomendado a los curiosos que se abstengan de acercarse al lugar de la explosión.

El fuego afectó a veinte depósitos de combustible, y no se descartan nuevas explosiones. El depósito de Buncefield, donde se produjo el incendio, fue construido hace cincuenta años, y aprovisiona también de combustible a los aeropuertos que sirven a Londres, desde el más próximo, el de Luton, situado a sólo 16 kilómetros, hasta los de Heathrow o Gatwick.

Se encuentra en las inmediaciones de la localidad de Hemel Hempstead, cuyos vecinos se han quejado más de una vez de la proximidad a sus casas de una instalación semejante.

Fuente: Diario Clarin

Hay 39 heridos a causa de las explosiones en Londres

Estallaron 5 tanques en el principal centro de distribución de combustible de la capital inglesa. Dos de las víctimas están graves y más de dos mil personas fueron evacuadas. Las autoridades despliegan operativos de asistencia porque el incendio tardaría varios dias en apagarse.

(AP/EFE). Una serie de explosiones en uno de los mayores depósitos de combustible en Gran Bretaña estremeció una zona del norte de Londres, la madrugada del domingo, y destrozó las ventanas de varias viviendas cercanas.

Treinta y nueve personas resultaron lesionadas, dos de gravedad, según las autoridades. La policía informó que al parecer, los estallidos fueron accidentales y que éstos iban a continuar por varias horas en el terminal Buncefield, cerca del pueblo de Hemel Hempstead, que almacena 16 millones de litros de combustible.

Al menos 2.000 personas fueron evacuadas hoy de hogares situados en las proximidades del centro de distribución de combustible al norte de Londres donde tres potentes explosiones ocasionaron hoy un espectacular incendio.

Los afectados serán albergados en centros deportivos y de ocio de la zona, refugios del Ejército de Salvación y viviendas de familiares o amigos, informaron las autoridades.

A consecuencia del siniestro, que ha generado incalculables daños económicos, numerosos edificios próximos sufrieron daños, sobre todo rotura de cristales.

Las autoridades han pedido a los vecinos de todas las localidades próximas que cierren puertas y ventanas y permanezcan en sus casas, por lo que aquellos que no pueden protegerse son trasladados a otros lugares.

«El incendio está controlado», dijo Frank Whiteley, jefe de la policía de Hertfordshire. «Es un siniestro grande y seguirá ardiendo durante algún tiempo, pero está bajo control».

No había ningún indicio de que se tratase de acciones terroristas, dijo la policía, aunque la organización terrorista al Qaeda había amenazado con atacar los depósitos de combustible.

Gran Bretaña ha estado en alerta desde las explosiones del 7 de julio en el sistema de transporte público, donde murieron 56 personas inclusive los cuatro atacantes suicidas, además de otros fallidos ataques el 21 de julio.

Aún no se determinó la causa de las explosiones, la primera de las cuales ocurrió a las 6 de la mañana, dijo Total SA, la empresa francesa de combustible que antes era propietario de Buncefield en una empresa mixta con Texaco. La subsidiaria británica Total UK está en contacto permanente con la policía y las fuerzas de seguridad, dijo en una declaración.

«Todo indica en esta etapa que se trata de un accidente», dijo Whiteley. «Sin embargo, claramente nos mantendremos receptivos conforme discurran las investigaciones, hasta que podamos confirmar la causa con certeza».

Una densa columna de humo se elevaba hasta unos 3.000 metros de altura sobre el área de Hemel Hempstead, en una extensión tan vasta que se reflejaba en las imágenes satelitales sobre el lugar. El humo también se expandió a gran altura sobre Londres, dijo Eddy Carroll, un experto del Servicio Nacional de Meteorología.

Trabajadores de emergencias acordonaron el área alrededor de la Terminal de Petróleo Buncefield, cerca de la población de Hemel Hempstead. Las autoridades desalojaron a los residentes, mientras una columna de humo avanzaba lentamente hacia el este.

Whiteley advirtió que la nube contenía elementos irritantes, los cuales podrían causar tos y náuseas. La gente ubicada en la trayectoria del humo debería abstenerse de salir de su vivienda, añadió.

Algunos residentes reportaron haber escuchado un avión que volaba muy bajo, poco antes de la primera explosión, ocurrida aproximadamente a las 6.00, pero la policía señaló que no había evidencias de que una aeronave hubiera caído en la zona.

El Aeropuerto de Luton, cerca de la región, permaneció abierto, y los vuelos operaban con normalidad.

El Hotel Ramada en Hemel Hempstead, a unos tres kilómetros de la terminal petrolera, fue desalojado después de que los vidrios de las ventanas quedaron destruidos por la explosión. Dos huéspedes sufrieron heridas leves causadas por los vidrios rotos, y fueron atendidos en el hotel, dijo Calum Russell, director de mercado de Jarvis Hotels Ltd.

Los 187 huéspedes regresaron a sus habitaciones, añadió Russell.

Una nube negra cubre el sur de Inglaterra

Una nube de humo negro se extiende sobre cientos de kilómetros del sur de Inglaterra tras las explosiones registradas hoy en el centro de distribución de combustible cerca de la localidad de Hemel Hempstead, al norte de Londres.

La Oficina Meteorológica británica advirtió que, aunque los vientos son ligeros, la nube podría alcanzar esta noche el puerto de Southampton (sur del país).

El humo, que según las autoridades no es en principio tóxico, es irritante y puede causar escozor en los ojos, tos y náuseas.

La espectacular nube de humo es visible incluso para los aviones que vuelan a una altura de casi 3.000 metros.

El meteorólogo Peter Kidds alertó de que cuando el humo se enfríe, algunas partículas de hollín, portadoras de sustancias contaminantes, podrían caer a tierra.

En su opinión, a pesar de que no estarían en altas concentraciones, serían suficientes como para generar cierta preocupación.

Las autoridades han recomendado a los habitantes de todas las zonas próximas que no salgan de sus casas y cierren puertas y ventanas.

En el caso de que los cristales de las ventanas se hubiesen roto en las explosiones, se les insta a buscar refugio en otro lugar.

Los meteorólogos no esperan ningún cambio en la dirección de los vientos en las próximas 24 horas que pueda afectar a la nube de humo.

Fuente: www.infobae.com

Cayó con su parapente y salvó su vida de milagro

Un hombre de 40 años se precipitó a tierra desde 30 metros luego de que su parapente sufriera un desperfecto en la zona de Los Acantilados.

Los bomberos del destacamento Puerto debieron rescatar a un docente de 40 años que sufrió fracturas expuestas en sus piernas al caer con su parapente en la zona de Los Acantilados.

El hombre salvó milagrosamente su vida al precipitarse a tierra desde 30 metros luego de que su parapente sufriera un desperfecto, según publicó el diario La Capital.

El accidente hizo que el deportista experimentara diferentes lesiones y por ese motivo fuera internado en el Hospital Interzonal General de Agudos (HIGA).

Marcelo Dimi es un docente marplatense que entre sus aficiones estaba la de realizar parapentismo, se trasladó hasta la zona de Los Acantilados para aprovechar las buenas condiciones de vientos para la navegación aérea.

Así, cuando sobre la Ruta 11 en el kilómetro 18, el deportista se lanzó al vacío y tras realizar algunas maniobras sin mayores inconvenientes, sufrió el embate de una ráfaga repentina.

Testigos aseguran que la vela se plegó y el parapentista fue a dar contra el acantilado, para luego caer hacia la zona de playa.

Durante tres horas los bomberos trabajaron para poder rescatar al hombre y para hacerlo tuvieron que descender con cuerdas hasta allí.

Fuente: www.infobae.com