Autor: Nestor Adolfo BOTTA

Un operario de una empresa contratista de Cablehogar que trabajaba esta mañana en altura cayó de espalda tras recibir una descarga eléctrica. El muchacho de 36 años se encontraba manipulando un cableado en Pasaje Boston al 3900, en Alsina entre Tucumán y Catamarca, cuando cayó desde 3 metros y quedó tendido en el piso, inmediatamente fue asistido por los vecinos y una ambulancia del Sies que lo trasladó al Sanatorio Laprida.

Gustavo Manuel Echeverría de 36 años se encontraba trabajando esta mañana subido a una escalera con un soldador y una garrafa arreglando unos cables de la empresa Cablehogar cuando recibió una descarga eléctrica que lo tiró al piso desde 3 metros de altura. El operario que pertenece a una contratista de la distribuidora rosarina de televisión por cable cayó de espalda y fue asistido por los vecinos que escucharon el ruido del golpe.

Inmediatamente llegó una ambulancia del Sies y el muchacho de 36 años fue trasladado al Sanatorio Laprida donde quedó internado. Si bien se encontraba consciente y podía responder algunas preguntas presentaba dificultad para mover su cuerpo.

Fuente: www.lacapital.com.ar

El sangriento accidente sucedió en uno de los despachos del sexto piso del Palacio de Tribunales de la provincia de Mendoza. De improviso, el aparato cayó y una de las aspas impactó contra la cabeza de la defensora.

Una defensora oficial resultó con severas lesiones en los tribunales provinciales. Cuando se encontraba en el despacho de una colega se le cayó encima un ventilador de techo.

Este grave suceso ocurrió el jueves de la semana pasada pero nunca se informó oficialmente.

La protagonista del insólito hecho fue la titular de la Segunda Defensoría, Dolores Ramón, cuyo despacho está ubicado en el sexto piso del Palacio de Tribunales.

Eran alrededor de las 12 cuando la magistrada decidió ir a la oficina de la codefensora Elena Ulfeldt, ubicada al costado derecho del suyo.

De improviso, el aparato cayó del techo y una de las aspas impactó violentamente contra la cabeza de la defensora, en el costado derecho. Le arrancó parte del lóbulo de la oreja y le provocó un corte en el cuello.

Mientras tanto, la víctima ya tenía el cuerpo manchado de sangre y fue socorrida por personal de la propia defensoría y otros compañeros, que ganaron el pasillo ante los gritos de auxilio.

Apenas llegó la ambulancia, la magistrada fue llevada al hospital Español.

Según trascendió en esferas tribunalicias, fue intervenida quirúrgicamente, debiéndole practicar una cirugía plástica para volver a colocarle parte del lóbulo que se le había desprendido.

También fue asistida por el corte en el cuello, que de haber sido más profundo –a decir de un médico– podía haber resultado fatal.

Apenas tomó conocimiento de lo sucedido, el administrador general de la Suprema Corte, Alfredo Segura, intervino inmediatamente tomando cartas en el asunto, que reviste carácter de grave.

«Es una negligencia que se podría haber evitado si se trabajara como corresponde, o sea si se es escrupuloso», sostuvo indignada una magistrada a Diario UNO.

Ayer a través de una resolución interna de la Corte, se dispuso que «a partir de la fecha sean revisados todos los ventiladores del Palacio Judicial».

La defensora Ramón ya fue dada de alta y se encuentra en su domicilio con licencia.

Fuente: www.infobae.com