Ocurrió en la ruta 26, a la altura de la ciudad de Nogoyá. En el vehículo viajaba una familia que regresaba de vacaciones de Brasil.
Un vehículo que se encontraba varado en la ruta 26 en Entre Ríos quedó totalmente destruido a causa de una explosión por un probable problema en el equipo de GNC (Gas Natural Comprimido), en la cual resultaron heridos un policía y un bombero que intervinieron en el lugar del hecho.
En el automóvil viajaba un grupo de personas provenientes de la ciudad de Rosario que regresaba desde Brasil, cuando debieron detenerse a la altura de la localidad entrerriana de Nogoyá por un inconveniente. Entonces, el conductor, que viajaba con su esposa y sus hijos de 8 y 11 años, detectó que había comenzado a salir humo del motor.
El hombre de 38 años, oriundo de Cuna de la Bandera, le pidió a su familia que descendiera del rodado y luego lo revisó, aunque no pudo abrir el capot de su Renault Fluence. Luego retiraron los bolsos y equipaje y el fuego comenzó a desatarse en la parte delantera del auto.
Ubicados a varios metros de distancia para resguardarse llamaron a la Policía, que arribó a la zona junto a personal de Bomberos para intentar apagar las llamas. Cuando estaban realizando la tarea, se produjo una gran explosión que hirió a dos de los funcionarios.
Un uniformado recibió lesiones en sus manos por la onda expansiva y debió ser trasladado a un hospital, mientras que uno de los bomberos sufrió un fuerte golpe en la cabeza, debido a un chapón que voló y lo impactó.
“Eran tres familias que venían de vacaciones de Brasil, una en cada auto. El que iba adelante empezó a salir por la ruta 26 saliendo de Nogoyá para el lado de Victoria. Antes de llegar al puente de arroyo Malo, empezó a salirle humo«, precisó el subjefe de la Jefatura Departamental de la ciudad entrerriana, Diego San Martín.
“Cuando empezaron a desplegar la manguera e iba un oficial de policía hacia el vehículo, estalló el tanque de GNC”, agregó en declaraciones a Elonce. “Salen las chapas del auto; una le pegó al oficial, le corta la mano derecha debajo del meñique y le hicieron cinco o seis puntos. También le impactó en el intercostal derecho”, detalló.
El Renault Fluence quedó totalmente destruido y finalmente lograron apagar las llamas con matafuegos. San Martín comentó que «gracias a Dios la familia está bien», al igual que el resto del contingente que regresaba a Santa Fe y adelantó que el auto será peritados para ver si tenía y contaba con las válvulas de seguridad autorizadas.
