El pequeño falleció por la humareda que desprendió el plástico de un televisor al derretirse por un cortocircuito. Los padres habían salido a hacer compras por el barrio.
Fue trágica la muerte de un chico en Cipolletti. El niño de tan solo tres años falleció asfixiado en su casa tras inhalar los componentes químicos que despidió el plástico de un televisor al consumirse por un cortocircuito.
La víctima, identificada como Enzo Rincón, se encontraba solo en su casa al momento de registrarse el siniestro. Los padres habían salidos un instante a hacer unas compras en el almacén del barrio.
Según informa hoy el diario El Litoral, el matrimonio volvió una hora después pero ya era tarde. La casa estaba inundada de humo negro y el pequeño muerto detrás de una de las puertas. En ese momento un vecino intentó reanimarlo pero fue imposible.
De inmediato fue trasladado al hospital local donde se determinó que el pequeño había fallecido antes por un paro cardiorespiratorio.
En tanto, los peritos indicaron que el televisor, que estaba encendido, se consumió totalmente sin generar llamas pero sí una intensa humareda.