Dos niños que estaban jugando en un montículo de algodón, en un campo del norte santafasino, muerieron calcinados, al incendiarse el lugar, por causas que se tratan de establecer. Los otros trse pequeños que los acompañaban resultaron con heridas de gravedad por las que fueron internados en cuidados intensivos.
Dos chicos calcinados y otros tres con quemaduras de gravedad fue el saldo de un peligroso juego de niños, sucedido en una propiedad rural de Campo Hardy, cuando los pequeños jugaban en un montículo de algodón que se prendió fuego.
El hecho ocurrió el sábado por la noche en un campo ubicado al Este de la ruta 11, a unos 2500 metros del acceso a Campo Hardy, jurisdicción de Florencia. Los terrenos son propiedad de Osvaldo Luis Muchiut, quien denunció en la policía el incendio en una parva de algodón que había cosechado entre viernes y sábado y que había dejado en la cabecera de la chacra para cargar el domingo.
Mientras tanto en Samco de Florencia ingresaron tres menores de edad, con quemaduras en el cuerpo. Se trata de Héctor Saucedo, de 12 años; Ramón Esquivel, de 13, y Oscar López, de 14.
Los chicos contaron que, con permiso de sus padres, habían ido ir a ver televisión a la casa de sus primos, pero que, en realidad, fueron a jugar al campo del vecino. Ahí, en el montículo de algodón, armaron una cueva que, sin que ellos lo advirtieran, ardió al propagarse el fuego encendido en unos pastizales por desconocidos.
La endeble estructura colapsó por las llamas, atrapando en su interior a dos pequeños de 10 y 11 años, que murieron quemados. Se trata de José Ramón Giménez, de 11, y Rosendo Saucedo, de 10. Los otros tres niños alcanzaron a escapar pero sufrieron quemaduras de distinta consideración.
Los cadáveres de las víctimas fueron rescatados por el personal de Bomberos Voluntarios de Las Toscas que arribó al lugar para sofocar el incendio.
