La víctima tenía 26 años y era padre de un niño de 7
SANTA FE.- Una joven trabajador de una planta desmotadora de algodón que funciona en el norte santafecino murió luego de agonizar algunas horas, como consecuencia de las graves heridas que recibió al ser aplastado por fardos de 200 kilos.
La víctima fue identificada como Ezequiel Andrés Luis Sosa, de 26 años, padre de un niño de 7 años, vecino de Barrio Don Pedro de Reconquista, cabecera del departamento General Obligado, situado a 330 kilómetros al norte de esta capital.
El accidente laboral se registró ayer, alrededor de las 14, cuando Sosa trabajaba en la planta desmotadora de la Unión Agrícola de Avellaneda (UAA) y fue aplastado por dos fardos de algodón que le cayeron encima.
Su hermana, Daniela Sosa, había confirmado anoche el grave estado en el que se encontraba Ezequiel, internado en el Sanatorio Norte de Avellaneda, con varias fracturas en sus miembros y pelvis. “Está todo reventado por dentro”, explicó claramente la mujer.
Luego de ser trasladado al centro asistencial, el trabajador fue sometido a cirugías tras lo cual ingresó a la sala de terapia intensiva, donde permanecía en estado delicado, hasta esta mañana, cuando familiares confirmaron su deceso.
El presidente de la UAA, Mario Julio Stechina, confirmó la gravedad del accidente en el que estuvo envuelto Sosa, el que sufrió heridas de consideración cuando su cuerpo fue impactado por fardos de algodón prensado, que pesan unos 200 kilos cada uno.
De acuerdo al reporte policial, lo que había explicado el encargado del sector industrial, Diego Suligoy, es que se produjo un derrumbe de las pilas de fardo prensado “se accionó de manera inmediata el protocolo”, siendo Sosa trasladado al sanatorio por el servicio de emergencias 107, donde fue asistido aunque falleció dada la gravedad de su estado y las complicaciones que surgieron.
“Conmovidos por la triste noticia, desde la UAA abrazamos a su familia, amigos y a todo el equipo de trabajo al que pertenecía, y elevamos una oración por su eterno descanso”, sostuvo un comunicado que divulgó horas atrás la citada cooperativa.
En adhesión al suelo por la muerte del trabajador, la empresa permaneció cerrada hoy.
Sosa estaba casado con Miriam Núñez y era padre de Tiago, de 7 años.