Un chofer de 64 años murió este lunes por la tarde en el sector de canteras de Calera Avellaneda, tras chocar de manera frontal contra otro camión, y quedó aplastado por la batea de su vehículo. Bomberos trabajó más de una hora para rescatarlo.
Alrededor de las 15,30 de este lunes se produjo un fuerte accidente entre dos camiones dentro de la empresa Calera Avellaneda, más precisamente en el sector de canteras.
El accidente se produjo entre dos camiones Mercedes Benz 1620, en un sector sumamente complicado donde hay una bajada muy pronunciada para camiones que van cargados de materiales.
Según indicaron fuentes oficiales, uno de los camiones bajaba por este sector mientras que el otro subía en dirección contraria, cuando el primero de ellos, con media carga de piedra, chocó contra el acoplado del segundo, que iba con una carga completa de piedra.
En el primer camión viajaba Carlos Chiarenzza, de 64 años, quien quedó atrapado en la cabina que se desprendió fue aplastada por la batea de su propio camión, de la empresa Granjas Integradas de nuestra ciudad. La víctima estuvo atrapada por más de una hora, mientras trabajaban bomberos y personal médico para rescatarlo. Sin embargo, Chiarenzza falleció cuando era trasladado por una ambulancia al Hospital Municipal.
Mientras tanto el otro vehículo que participó del accidente era conducido Javier Menéndez de Transporte Fernández, que resultó ileso.
Los trabajadores de la cantera vienen reclamando desde hace tiempo mejores condiciones de tránsito en el interior de la cantera y hoy lamentaban el accidente. Las primeras reacciones fueron de mucho dolor y estupor ante semejante escenario.
Según indicaron a este diario, el tránsito es muy complicado porque los regadores no alcanzan, se levanta mucho polvo y eso dificultaría la visión en ese sector. Por eso se lamentan que haya sucedido este accidente que le costó la vida a un compañero de trabajo.
Los trabajadores se habrían estado reuniendo con las autoridades de la firma pidiendo mejores condiciones de trabajo y ayer recordaron que «nos han dicho que estaban ajustados de presupuesto», con lo cual además de la sorpresa por el fallecimeinto del hombre había mucha tensión.
En el lugar trabajó personal de dos dotaciones de Bomberos, una de ellas del destacamento de Loma Negra a cargo del suboficial Leonel Funes, y la otra como dotación de apoyo del cuartel central, a cargo del comandante Julio César Kolman.
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