Un derrame de cinc al rojo vivo causa un incendio que para la producción de Azsa

Los electricistas de la compañía trabajaban anoche en la revisión del sistema energético del horno Número 7, donde se produjeron las llamas

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Un derrame de cinc a más de 500ºC en el foso del horno de fundición Número 7 de la planta de San Juan de Nieva de Asturiana de Zinc (Azsa) causó ayer, pasadas las 18.00 horas, un aparatoso incendio que tuvo que ser sofocado por los bomberos acuartelados en Avilés y en La Morgal.

Este siniestro -sin daños personales- detuvo de manera inmediata la producción del horno afectado de la tercera fábrica de cinc que más producción comercializa en el mundo. Al cierre de esta edición, los electricistas de la compañía trabajaban a destajo en la revisión de todo el sistema eléctrico del departamento (al final de la cadena productiva). Por esta razón, la empresa no había podido cuantificar aún las consecuencias reales del accidente.

El incendio provocó una gran nube negra que alarmó a los vecinos y que los bomberos disiparon en pocos minutos. A las 20.39 horas, el Jefe de Zona Centro informó a la Sala 112 del Servició de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) que los bomberos desplazados a las instalaciones de Asturiana de Zinc regresaban al parque.

La primera llamada de emergencias se produjo a media tarde de ayer. Según una nota oficial, personal de la empresa «explicaba que se había producido un incendio en una de las naves de fusión». El Servicio de Emergencias señaló, asimismo, que «los trabajadores habían controlado el incendio con espuma, pero solicitaban colaboración para continuar con las labores de extinción». Como marca el protocolo se informó de lo sucecido a la Policía Local de Castrillón, a la Guardia Civil, al SAMU (Servicio de Atención Médica Urgente), a los técnicos de Medio Ambiente del Principado y a los técnicos de Protección Civil.

La empresa restableció el suministro eléctrico para los otros tres hornos de cinc. La fuga de cinc líquido se detuvo una vez que solidificó este. Los trabajadores de la compañía esperaban a que las chuponas permitiesen el paso al sótano del horno afectado y poder clarificar la gravedad de lo acontecido.

Fuente: www.lne.es

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