Un joven de 16 años terminó con cicatrices y quemaduras en el cuerpo tras un insólito percance.
Un joven de 16 años se puso un collar y casi muere electrocutado en un accidente que, a primera vista, parece increíble. Rayce es el nombre del adolescente estadounidense que sufrió cicatrices y quemaduras en su cuerpo tras un insólito percance ocurrido en su casa del Estado de Oklahoma (centro del país).
“Todo pasó en cuestión de segundos y de repente le salían chispas del cuello”, reveló Danielle Davis, la mamá del joven, en diálogo con el medio “Kennedy News”.
Todo comenzó cuando Rayce se fue a dormir a su habitación, pero tras una hora, su madre oyó gritos y ruidos extraños que provenían de ese lugar. Al principio, creyó que se trataba de su fastidio por perder en los videojuegos, pero al rato comprendió que algo distinto estaba sucediendo.
“Lo escuché gritar ‘Mamá’ y cuando fui a verlo estaba parado en el pasillo, ahí me dijo que su collar lo había electrocutado”, recordó la mujer, y contó que el cuello de su hijo tenía una profunda quemadura con la marca de la cadena de su collar.
Y prosiguió: “Toda la casa olía a pelo y piel quemada, y a quemaduras eléctricas. Me dijo que le dolía todo el cuerpo y que pensó que se iba a morir”, reveló, todavía muy angustiada.
Tras llamar a emergencias, el joven le contó lo que pasó en su cuarto: “Nos explicó que estaba en la cama y que se dio vuelta para ponerse cómodo cuando escuchó que algo se cayó de la cama”.
Cómo fue el accidente que electrocutó al joven
Fue ahí que Rayce se inclinó para ver si su teléfono estaba cargando correctamente, pero su collar tocó las puntas expuestas de un enchufe que le produjo una descarga eléctrica de 110 voltios.
“Él me dijo que estuvo consciente todo el tiempo y que sabía que lo estaban electrocutando. Como era metal, hizo un circuito completo alrededor de su cuello”, contó Danielle, y agregó que las manos tenían quemaduras al tratar de desenchufar el cable. “Estaba tan caliente que soldó parte de su cadena al cargador”, reveló.
