El caos producido por la nube tóxica que afectó a los porteños desnudó la ausencia de respuestas y consignas ante estos casos, indicó la Funam. La nube tóxica afectó a cientos de personas expuestas en los barrios de Constitución, Balvanera, Retiro, Congreso, San Telmo, Puerto Madero, Recoleta y el centro porteño.
«Buenos Aires no está preparada para protegerse de accidentes químicos y mucho menos de índole nuclear», indicó la Fundación para la defensa del Ambiente (Funam), tras «analizar lo sucedido públicamente después que un contenedor marítimo ubicado en la Terminal 4 del puerto de la ciudad de Buenos Aires desprendiera residuos del insecticida thiodicarb, y generara la densa nube tóxica».
La nube tóxica afectó a cientos de personas expuestas en los barrios de Constitución, Balvanera, Retiro, Congreso, San Telmo, Puerto Madero, Recoleta y el centro porteño. Se registraron muchos casos de víctimas de trastornos respiratorios además de ardor en garganta y oídos. «Fue evidente la inexistencia de preparación pública y la ausencia de consignas claras para actuar en este caso», indicó la organización con status consultivo en ONU. Ver más