Un niño de 12 años perdió el dedo índice cuando su mano derecha quedó prensada en una máquina trituradora de carne.
El accidente se produjo ayer a las 8:45 a. m. en el local Carnes Monteverde, situado en Fátima de Desamparados. | MARCO MONGE
El accidente se produjo a las 8:45 a. m. en Carnes Monteverde, en la entrada a la urbanización Monteverde, en Fátima de Desamparados. El negocio es propiedad del padre del menor.
Orlando Urroz, director del Hospital Nacional de Niños, dijo anoche que, aunque los dos siguientes dedos (el medio y el anular) presentan lesiones “muy importantes”, el ortopedista decidió hacer un procedimiento para conservarlos y los fijó con tejido y hueso.
“Será un proceso largo de revisión, curación, de cirugía plástica. Se va a ir viendo la evolución. Es prematuro decir si los va a perder o le quedarán fijos. Hay que esperar”, explicó el médico.
El menor se hallaba estable anoche en sala de recuperación.
Hecho. El accidente se produjo cuando en la carnicería se encontraban el padre del niño, otra persona que le colabora y el menor.
Por razones no establecidas ayer, al niño metió la mano derecha en la máquina trituradora de carne y le quedó prensada.
El socorrista Jeffry Leal Montero, de la Cruz Roja de Desamparados, quien estuvo en el lugar, dijo que para liberarle la mano, debieron desmontar la máquina. “Lo primero fue estabilizar al niño. Él se encontraba tranquilo. Eso nos benefició. En menos de 10 minutos fue liberado y de inmediato se procedió al traslado al hospital. Nos benefició que no hubo un sangrado abundante”, relató el socorrista.
Leal agregó que también les ayudó que el padre y el otro familiar se mostraron tranquilos.
Aunque La Nación intentó conversar con personas cercanas al negocio, ninguno de los consultados dijo haber estado en el momento del hecho. Solamente se limitaron a afirmar que había sido un accidente.
Un criterio similar emitió el director del HNN, Orlando Urroz, quien agregó que inicialmente el caso se maneja como accidental.
No obstante, advirtió que el Departamento de Trabajo Social va a realizar una investigación sobre el caso.
“Es una situación de mucho dolor para los papás. Lo tenemos como un accidente. No es una situación de trabajo, pero se va a investigar”, concluyó Urroz.