El joven, de 15 años, se encontraba con amigos en una jornada de caza y pesca. Falleció por un balazo en el abdomen.
Un adolescente murió por un disparo accidental que se produjo cuando estaba de caza con amigos en un establecimiento rural, a casi 50 kilómetros de Tandil, se informó ayer.
El hecho se produjo la noche del domingo cuando uno de los jóvenes del grupo de caza levantó una carabina del piso, por lo que accidentalmente el arma se accionó y el proyectil impactó en el abdomen de su amigo, un chico de 15 años, hijo de un policía bonaerense, informaron voceros policiales.
La víctima fue identificada como Rubén Núñez, un adolescente de Tandil, que participaba de una jornada de caza y pesca con al menos otros dos chicos y alguno de sus padres.
Los jóvenes estaban en un establecimiento rural del partido de Azul, cercano al arroyo Los Huesos, ubicado a unos 50 kilómetros de Tandil, a la altura del kilómetro 211 de la Ruta Nacional 226.
Se hizo cargo de la causa el titular de la Seccional Primera de Azul.