Una explosión en un depósito de glicerina de la empresa farmacéutica Viviar, a las afueras de Paterna (Valencia), originó ayer la muerte de un trabajador que se encontraba en el tanque descargando el líquido.
El suceso tuvo lugar cuando el empleado, de 35 años, estaba sobre el tanque calentando la glicerina para hacerla más líquida y trasvasarla al camión, cuyo conductor resultó ileso a pesar de que la parte superior del tanque salió despedida e impactó con el vehículo.
Los restos del cadáver quedaron esparcidos por todo el recinto, mientras que parte del tanque llegó a alcanzar los 40 metros de longitud tras la explosión, que fue escuchada en el casco urbano de Paterna, a unos tres kilómetros del lugar del siniestro. Pese a que en el interior del depósito se produjo un incendio, los bomberos descartaron que se produjeran más explosiones y extinguieron las llamas de inmediato.