Diez años después del incendio del edificio madrileño Windsor, su destrucción sigue llena de incógnitas
Ha pasado una década desde el incendio que acabó con el rascacielos en pleno centro financiero de Madrid. El caso quedó cerrado, dejando como culpable una colilla mal apagada en la planta 21. En ésta planta estaba la compañía Deloitte.
Sin embargo, aún hay gente que no se cree esta teoría. El Windsor, de 30 plantas, se destruyó por completo; y los bomberos, más que salvar el edificio, evitaron que el incendio acabara con los de alrededor.
Fantasmas en el Windsor
Fotograma de los «fantasmas» Foto: Telemadrid
En la grabación de una videoaficionada se pueden ver dos siluetas a través de una ventana, en la planta 16 del edificio. Este vídeo y otras grabaciones fueron analizados por la Policía Científica, quienes determinaron que se trataba de dos personas. Pero nunca se supo quiénes eran.
2. La caja fuerte secreta
En la planta cuarta del Windsor trabajaba la compañía Comparex España. Tras el incendio, la empresa pidió al Juzgado que recuperasen su caja fuerte, pues contenía «documentos del Ministerio de Defensa reservados». Poco después, tanto el ministerio como Comparex negaron esta información, limitando los informes a simples contratos.
Un misterioso butrón
La Policía halló una agujero, realizado desde el interior del Windsor hasta los garajes. No se hallaron huellas. Los agentes declararon que apenas «podría pasar una persona delgada» por él, pero nunca se aclaró el motivo de este butrón.
El fuego creció de pronto
El incendio aprecía controlado durante la madrugada, pero de pronto una llama inmesa explotó. «Fue como si algo lo hubiera alimentado», declaró el jefe de Seguridad. Aunque pudo ser un escape de gas, nunca se encontró la verdadera explicación.
El agua de los bomberos
Esa misma noche, los bomberos tuvieron problemas con la presión del agua, que no llegaba bien a sus mangueras.
¿Y los aspersores?
No hubo aspersores que se encendieran automáticamente durante el incendio. Los peritos se defendieron, dijeron que funcionaban perfectamente, pero culparon a los bomberos de no haber actuado correctamente.
El expediente FG Valores
Otro documento importante que se quemó aquella noche tenía que ver con el presidente del BBVA Franciso González. Se trataba de una auditoría. Anticorrupción estaba investigando la venta de FG Valores a Merrill Lynch. El presidente de Deloitte explicó que esos documentos se encontraban en la planta 23, que había quedado destruída, y que no había copia. Sin embargo, sí que existían copias de casi todos los documentos en otro edificio. Otro misterio sin resolver.