Una explosión y un incendio en una plataforma petrolera en la costa de Luisiana dejaron ayer cuatro personas heridas con quemaduras graves y dos desaparecidas.
El capitán de la Guardia Costera Ed Cubanski dijo en conferencia de prensa en Nueva Orleáns que el pozo no estaba produciendo en ese momento y no se derramó petróleo. Una pequeña cantidad de crudo se vertió cuando los trabajadores utilizaban un soplete para cortar una línea de 22 metros de largo y 7 centímetros de ancho en la plataforma. Cubanski agregó que fue reportado un rastro de 800 metros de largo y 182 metros de ancho.
“No va a ser una descarga descontrolada de todo lo que estamos teniendo ahora”, declaró Cubanski.
El incendio ya fue extinguido, informó el portavoz de la Guardia Costera Drake Fore. Agregó que aeronaves y botes de la Guardia Costera están buscando a dos personas desaparecidas. Se cree que nadie murió en el incendio y Cubanski dijo que 11 personas fueron transportadas por aire desde la plataforma a hospitales para recibir tratamiento.
Taslin Alfonzo, vocera del Centro Médico West Jefferson en Nueva Orleáns, dijo que cuatro trabajadores lesionados ingresaron al hospital en condición delicada con quemaduras de segundo y tercer grado en gran parte de sus cuerpos.
El capitán de la Guardia Costera, Peter Gautier, dijo al canal WWL-TV que al parecer había 28 personas en la plataforma al momento del siniestro.
La plataforma de producción, propiedad de Black Elk Energy, está a unos 40 kilómetros 25 millas) al sureste de Grand Isle, Luisiana. Cubanski indicó que había 28 galones de crudo en el oleoducto roto.
No ha sido posible establecer contacto inmediatamente con algún portavoz de Black Elk Energy para hacer declaraciones. Black Elk Energy es un productor independiente de petróleo y gas con sede en Houston, Texas.
El sitio web de la compañía dice que la empresa tiene propiedades en las aguas de Texas y Luisiana, entre ellas 854 pozos en 155 plataformas.
La explosión se produce un día después que dos altos responsables de la BP fueron inculpados de homicidio involuntario por el derrame que comenzó con una explosión en una plataforma de alta mar en 2010.
La BP acordó pagar una cifra récord de 4 mil 500 millones de dólares en la historia de las multas de Estados Unidos por el derrame de 2010 en el Golfo de México luego de ser considerada culpable de 14 cargos, incluyendo homicidio criminal por la muerte de 11 trabajadores de su plataforma.
