Patricia Fernández Salinas, una vecina de Armilla, cuenta a este diario cómo vivieron los viandantes la ignición registrada en la fábrica de perfumes este jueves
La deflagración registrada el jueves a las 22:00 horas en la fábrica de fragancias Symrise de Armilla ha dejado daños materiales en el interior de sus instalaciones y ha obligado al desalojo preventivo de parte de un parque comercial cercano de esta localidad granadina, donde se ha recomendado a vecinos próximos el cierre de puertas y ventanas.
Este suceso ha tenido lugar minutos después de las 22.00 horas, cuando una decena de personas han alertado al Centro Coordinador de Emergencias de que habían percibido una gran explosión, según ha informado el 112, que ha movilizado hasta la zona a efectivos de bomberos, policía, guardia civil y emergencias sanitarias.
Patricia Fernández Salinas, una vecina de Armilla cuenta que sobre las 22:20 horas se situaba en la terraza del McDonald’s que se encuentra a la entrada del pueblo. De repente, «sonó un estruendo muy fuerte, vibró el suelo, temblaron los cristales, y se fue la luz durante unos segundos». La joven granadina, de 25 años, explica que «todo el mundo miraba a través de los cristales del restaurante a ver qué pasaba. No había ningún coche accidentado, nada con humo alrededor, pero dos minutos más tarde, empezó a ‘llover'». Esta joven no sabía lo que era hasta que le empezaron a picar los brazos. «Miré hacia el cielo y me cayeron gotas, me picaba la boca y la lengua». Patricia relata a este diario que no se podía respirar y que los empleados de la cadena americana fueron «amabilísimos y con muchísima responsabilidad ciudadana».
La fábrica, perteneciente a la multinacional alemana Symrise, se ubica en la Avenida Fernando de los Ríos, vía que ha quedado cortada parcialmente al tráfico para facilitar el trabajo de los efectivos de emergencias.
Patricia Fernández decidió irse del lugar por miedo a que hubiese otra ‘explosión’. «Corrí hasta el coche con la mascarilla puesta, sin respirar. Ahora, tengo rojeces en el brazo y en los pies». Supone que estas manchas son debidas a los gases emitidos por la deflagración. Agradece haber llegado a casa y espera poder descansar porque «el miedo en el cuerpo» no se lo quita nadie.
La alcaldesa de Armilla, Dolores Cañavate, que se ha desplazado hasta el lugar de los hechos, ha indicado a EFE que no se han registrado heridos y que los daños -de tipo material- se limitan al interior de las instalaciones de la factoría.
A consecuencia de la deflagración -que no ha conllevado un posterior incendio- se ha procedido al desalojo preventivo de una hamburguesería de la cadena McDonald’s, ubicada en el Parque Comercial Albán y próxima a la fábrica de fragancias, y se ha recomendado a los vecinos cercanos al lugar del siniestro que cierren puertas y ventanas por si se hubiera producido algún tipo de fuga de componentes químicos.
Aunque de momento se desconocen las causas exactas de la deflagración, que habría coincidido con un cambio de turno de trabajadores en las instalaciones, la regidora ha apuntado a la posibilidad de que hubiera podido registrarse en uno de los depósitos, si bien será la posterior investigación la que determine el origen con exactitud.