«La muerte de un trabajador en un silo es un homicidio premeditado y será denunciada penalmente». La contundente frase fue lanzada por el ministro de Trabajo de la provincia, Carlos Rodríguez, en una semana marcada por la muerte de dos trabajadores en sendos accidentes ocurridos en plantas cerealeras. El funcionario mantuvo en Rosario un encuentro con representantes de entidades que nuclean a productores rurales, trabajadores agropecuarios y de cámaras que agrupan a los acopiadores de granos, con quienes analizó las condiciones de seguridad en ese tipo de instalaciones.
Durante el encuentro cumplido en la sede Rosario de la Gobernación, el titular de la cartera laboral sostuvo que «es inaceptable que un trabajador pierda la vida en un silo» porque, según indicó, las causas de los accidentes laborales en ese tipo de instalaciones «son archiconocidas» , por lo que al no adoptarse las medidas preventivas correspondientes estos hechos «constituyen homicidios premeditados».
Con dureza, el ministro Rodríguez advirtió luego que «toda muerte en un silo será denunciada penalmente, ya que está claro que son los empleadores quienes tienen el deber de brindar seguridad en este tipo de trabajo».
El encuentro, convocado para analizar la situación de salud y seguridad laboral en este tipo de plantas con la presencia, además, del secretario de Seguridad y Salud, Carlos Vaca, quien hizo referencia a los distintos accidentes ocurridos últimamente en ellas.
Un saldo positivo del encuentro fue el acuerdo en torno a una actividad conjunta entre trabajadores y empleadores, sobre el establecimiento de un código de buenas prácticas referidas a la actividad en los silos y el dictado de cursos de capacitación.
Con relación al segundo punto, el Ministerio pondrá a disposición de todos los empleadores propietarios de silos un curso de formación para sus empleados, por lo que dentro de 15 días se realizará una nueva reunión. «Espero que estas reuniones sirvan para poner coto a una situación inaceptable», dijo al respecto el ministro Rodríguez.