Catástrofe ecológica: pánico en China y Rusia por un derrame tóxico

FUE POR LA EXPLOSION DE UNA PETROQUIMICA HACE 15 DIAS Y HAY MILLONES DE PERSONAS SIN AGUA POTABLE.
El río chino Shonghua fue contaminado y la sustancia cancerígena llegará a aguas rusas.


EN BUSCA DEL AGUA. LARGAS FILAS EN HARBIN, CON AGUAS CONTAMINADAS POR EL BENCENO DERRAMADO SEMANAS ATRAS. (Foto: Reuters)

Una mancha de 80 kilómetros cuadrados de benceno, un producto extremadamente tóxico, surcaba ayer a 100 km por hora el río Shonghua en la ciudad de Harbin, al noreste de China, generando pánico en la población. El vertido venenoso se produjo el 13 de noviembre, cuando Petrochina, una subsidiaria de la petrolera estatal china derramó por accidente el benceno, un hidrocarburo altamente cancerígeno. Miles de personas se precipitaron a abandonar la ciudad, de casi cuatro millones de habitantes, luego de que las autoridades cortaron el martes el suministro de agua potable, ante el riesgo de contaminación.

El derrame tuvo su origen en Jilin, a unos 200 kilómetros de Harbin, en donde dos semanas atrás la explosión de una planta química causó la muerte de cinco personas y heridas a unas 70, además de contaminar el río Shonghua y algunos afluentes.

Según las autoridades chinas – muy cuestionadas por no advertir el peligro inmediatamente a la población – son 100 toneladas de benceno las que cayeron al río. Se trata de una sustancia no soluble en agua, aromática y que puede provocar graves envenenamientos en humanos y daños irreversibles en la sangre, el hígado, el cerebro y los riñones.

La firma canadiense McCain, Nø 1 mundial en alimentos congelados, anunció que detuvo provisoriamente la producción de papas fritas en su fábrica de Harbin. Otras empresas decidieron continuar con sus actividades. El pánico en la población ya superó la ciudad, la provincia y hasta el país. No sólo China desespera por la contaminación de sus aguas: en Rusia, los 600 mil habitantes de Jabarovsk, en Siberia, ya esperan alertas el arribo de la mancha venenosa.

Ocurre que el vertido tóxico llegará allí a través del río Amur – afluente del Shonghua – , que cruza esa ciudad y que, según se calcula, se verá contaminado entre el sábado y domingo. Con 4.410 km, el Amur es uno de los 6 ríos más largos del mundo. Como desemboca en el Pacífico, se elevan los riesgos de contaminación y de gravísimo impacto ambiental. Algunos expertos opinan además, que la mancha podría llegar a Rusia con una dimensión 40 veces mayor. Las autoridades han almacenado agua del río en cisternas, para los cuatro días de emergencia previstos.

Si en Harbin pudo verse como los negocios comenzaban a despachar frenéticamente botellas de agua mineral para reemplazar el agua que ya no sale de las canillas, en la siberiana Jabarovsk – con 12 grados bajo cero y a la espera de mayores fríos – las expectativas no son menos dramáticas.

Por un lado, la presencia de hielos sobre el río Amur le impiden ser navegado, lo que dificulta la toma de muestras de agua envenenada, que amenaza a al menos 1,2 millón de personas en la región. Por otra parte, si el frío detiene la circulación de la mancha, se deberá cortar el acceso al agua de las canillas, incluso la caliente, por lo que los habitantes del lugar se quedarán sin calefacción en pleno invierno. En el Parlamento ruso, ya se oyen voces que piden al gobierno chino compensación por el desastre ecológico y las pérdidas, ya que el Amur es un río muy rico en pescados y moluscos.

En Harbin, en tanto, las autoridades informaron la inversión de 1,2 millón de dólares en la limpieza del Shonghua, aunque no aclararon qué prácticas llevarán a cabo para asegurarse la eliminación de los residuos tóxicos.
HARBIN Y MOSCU. ANSA, AP Y AFP.

Fuente: Diario Clarin

Un nuevo derrame tóxico amenaza a otra ciudad de China
Más de seis mil personas tuvieron que ser evacuadas de Chongqing, en el centro del país. Una explosión en otra planta química generó el desastre.

Una segunda explosión en una planta química en menos de dos semanas puso en evidencia la precariedad de los controles en China, donde más de 6.000 habitantes de la ciudad de Chongqing tuvieron que ser evacuados ante una posible contaminación masiva.

Ayer, una nueva explosión en una fábrica de productos químicos ubicada cerca de Chongqing, en el centro de China, mató a una persona, causó heridas a otras tres y vertió tóxicos en los alrededores, según informaron hoy medios locales.

Este episodio se conoció a 12 días de que una explosión en una planta petroquímica en la provincia de Jilin provocara el vertido de cien toneladas de benceno, una sustancia extremadamente tóxica, en el río chino Songhua, cuyas aguas avanzan a unos 100 kilómetros por día hacia el río ruso Amur a donde se espera que lleguen a partir de este fin de semana. La mancha de benceno, que tiene 80 kilómetros de largo, contamina todo a su paso. (Edición impresa).

Por la explosión en Chongquing, las autoridades evacuaron a miles de personas y advirtieron a los habitantes que no beban el agua del río Yangtsé por temor a que se produzcan envenenamientos por benceno.

El benceno es un hidrocarburo aromático altamente tóxico y cancerígeno, no soluble en agua, sin olor, que puede provocar envenenamiento y daños irreversibles en la sangre, el hígado, el cerebro y los riñones.

En tanto, en Rusia, el jefe del Departamento de Emergencia y Defensa Civil en la región de Jabarovsk, Ivan Sych, anunció la prolongación de la alerta roja, ante la llegada inminente de las aguas contaminadas del río Songhua.

Fuente: Diario Clarin