ACCIDENTES DOMESTICOS. La otra inseguridad

Caídas, intoxicaciones o quemaduras: algunos de los riesgos que se corren puertas adentro. Entre el descuido y la falta de prevención, se los considera una epidemia.

No deben ser atribuidos ni al destino ni a la providencia ni a la mala suerte, entre desencadenantes de un accidente hay una relación causal en la que se puede intervenir para evitar o minimizar sus consecuencias. Entonces, según dicen los especialistas, los que habitualmente se consideran accidentes, no son en realidad accidentes. Porque en su mayoría son previsibles y evitables. Y un accidente es, por definición, imprevisible. Por eso prefieren hablar de lesiones no intencionales. â??El arraigo que tiene el término â??accidenteâ?? es popular y técnico. La comunidad profesional también lo usa. Y si no se entiende la etimología de esta enfermedad (la lesión es una enfermedad) y cómo se previene, es probable que no se pueda disminuir el número de víctimasâ??, dice Laura Bosque, directora del Comité de Prevención de la Sociedad Argentina de Medicina y Cirugía del Trauma.

De acuerdo a la Dirección de Estadísticas e Información de Salud del Ministerio de Salud, en 2003 se registraron 6500 muertes por traumatismos accidentales (sin contar las ocasionadas por accidentes de tránsito, suicidios y agresiones) y, según la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud, en 2002 hubo poco menos de medio millón de casos de lesiones ocasionadas en el hogar. â??Del ámbito doméstico se registra poco. Pero el trauma (esto incluye choques, agresiones, autoagresiones) es la primera causa de muerte en personas de 1 a 45 años y la causa de dos de cada tres muertes en niñosâ??, explica Jorge Neira, médico intensivista, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos del Sanatorio de la Trinidad de Palermo y ex presidente de la Sociedad Panamericana de Trauma. Pero es complicado hablar de cifras, faltan estadísticas: â??No contamos con un registro nacional y único de trauma. Además, muchas lesiones que ocurren en el hogar no llegan a los centros de salud y se pierde por completo el dato. Aún así, se sabe que el hogar es uno de los lugares donde ocurren más lesionesâ??, agrega Bosque.

Según información que maneja la Sociedad Argentina de Medicina y Cirugía del Trauma, en Estados Unidos, donde sí hay estadísticas, las lesiones producidas en el hogar producen 26 mil muertes por año y 7 millones de traumatismos. Son las víctimas de caídas, quemaduras, asfixias y disparos no intencionales de armas de fuego. Estas muertes domésticas representan el 20% de todas las producidas por traumatismos (entre las que se cuentan los homicidios y los accidentes de tránsito, entre otras). Alguien muere cada 20 minutos y cada cinco segundos alguien sale lastimado a causa de los (mal llamados) accidentes. Algo más: al sistema de salud, la atención de estas personas, le cuesta 16.700 millones de dólares. â??Se dice que por cada dólar que se gasta en prevención primaria (educación) se ahorran seis dólares en terciaria (atención hospitalaria)â??, señala Neira.

Los niños y los ancianos son los más expuestos y dentro de la casa hay dos lugares especialmente peligrosos: el baño y la cocina. Dejando de lado los accidentes de tránsito, â??lo que más ingresa en los hospitales son caídas y buena proporción de ellas se producen en el ámbito domésticoâ??, indica Neira. Sin embargo, para Alberto Iñón, cirujano pediatra del Hospital Italiano, presidente de la Asociación Prevención del Trauma Pediátrico y también presidente de la subcomisión de Accidentes Domésticos de la Sociedad Argentina de Pediatría â??las prevalencias difieren en cada población, no pasa lo mismo en todas partes de Argentinaâ??.

Según la Red de Trauma Pediátrico el 39% de las lesiones de los chicos argentinos se producen en el hogar y el 38% corresponde a las caídas de altura. â??De acuerdo al Indice de Trauma Pediátrico, la mayoría de las lesiones, aún cuando requieren internación, son leves. Pero el 25% son lesiones graves que llevan a la muerte o producen discapacidad. Uno de cada tres niños queda con algún tipo de secuelaâ??, dice Iñón. â??Estudios sobre 10.200 pacientes, realizados por la Asociación Prevención del Trauma Pediátrico, dicen que los ahogamientos, las intoxicaciones y las quemaduras tienen un promedio de edad por debajo de los 5 años. Para las caídas el promedio es de 10 añosâ??.

Lo inquietante es que cuanto más seguros nos sentimos en casa, menos percibimos los riesgos. â??No nos vemos vulnerables en casa pero sí en la calle. Esto facilita que las lesiones ocurran. Desde lo más imprevisible hasta lo más previsible. Si no pienso que puede ocurrir, no lo voy a poder evitar. Hace falta esa conciencia para empezar a cambiar la conducta, los ambientes y los productos que utilizamosâ??, explica Bosque. Y los factores de riesgo, se sabe, son tan variados como cotidianos: alacenas altas a las que no se llega sin un banquito, enchufes sobrecargados, escaleras resbalosas o mal iluminadas. Los adultos mayores suelen tropezarse con alfombras o resbalarse en el baño mientras que los chicos pueden ahogarse en pocos centímetros de agua.

Lo cierto es que la prevención es el remedio para esta amenaza que pasa casi inadvertida. Aunque en algunos países desarrollados como Suecia, Noruega o Canadá, las estrategias de prevención lograron disminuir las cifras de mortalidad y secuelas en los últimos 20 años, en Argentina sucede lo contrario. Explica Bosque: â??El problema tiene muchos años y nunca se lo ha contrarrestado con políticas nacionales, así que es esperable que avance. No hay campañas de prevención y no se puede siquiera hacer un diagnóstico porque faltan estadísticas. Sobre todo en el ámbito doméstico, el tema está fuera de controlâ??.

Por María Farber. Especial para Clarín.com.
conexiones@claringlobal.com.ar

Fuente: Diario Clarin

Nena de 17 meses murió ahogada en un balde en Formosa

La pequeña estaba jugando en la presencia de su madre, quien se descuidó por unos minutos. Cuando volvió con su hija, ella había caído en el recipiente de 20 litros de agua.

Ayer al mediodía una pequeña de un año y cinco meses estaba jugando con su madre en su casa de Formosa. La mujer perdió de vista a la niña, quien en un descuido cayó en un balde de 20 litros de agua, en donde murió ahogada.

La mujer se dio cuenta de su descuido y procedió a buscar a su pequeña. Al llegar junto al balde notó que había algo en su interior. En él yacía el cuerpo sin vida de su hija, según publicó el diario el Comercial de Formosa.

El episodio conmocionó a los vecinos, quienes rápidamente ayudaron a trasladar a la menor a la sala de primeros.

Fuente: www.infobae.com

Embarazada murió electrocutada pero lograron salvar a su bebé

Una mujer de 21 años estaba lavando la ropa cuando decidió abrir la heladera con las manos mojadas. Recibió una descarga que le costó la vida pero con una cesárea recuperaron a su hijo.

Débora Alarcón , embarazada de nueve meses, murió electrocutada en la localidad bonaerense de Florencio Varela. La rápida intervención de sus familiares permitió que médicos de un hospital de la zona salvaran la vida del bebé, que al nacer pesó 3,400 kilogramos.

La joven, de 21 años, ingresó muerta al Hospital de San Francisco Solano, las «maniobras de resucitación» mantuvieron con vida al bebé. El pequeño permanece internado, según informó la agencia Télam.

«Afortunadamente el bebé evoluciona bien, aunque él también sufrió la descarga eléctrica», informó el vicedirector de ese centro de salud, Néstor Torregiani. “A la joven se le hicieron maniobras de resucitación porque había sufrimiento fetal y había que actuar rápido», explicó el especialista.

La joven fallecida, que tenía otro hijo, fue sometida a una cesárea y el bebé permanece internado «con oxígeno» aunque «se le retiró el respirador artificial».

El accidente ocurrió el miércoles último, en el interior de una vivienda ubicada en La Rastra y Cala del barrio 3 de Febrero del partido de Florencio Varela, cuando la joven que estaba lavando ropa fue a abrir la heladera con las manos mojadas y descalza.

Fuente: www.infobae.com

Regaba el césped y murió electrocutada

Una cordobesa falleció luego de rozar un alambre electrificado en su casa mientras regaba el jardín. El fatal roce le provocó un paro cardiorrespiratorio.

(NA). Una mujer murió electrocutada en momentos en que regaba el césped en el parque de su vivienda, ubicada en la capital cordobesa, según informó hoy la Policía provincial.

De acuerdo con los primeros informes de los peritos del caso, la tragedia se desencadenó cuando la mujer rozó un alambre que aparentemente estaba electrificado, lo que le provocó la muerte de manera casi instantánea.

El trágico episodio se registró anoche en un domicilio situado en manzana 22, lote 17, de barrio Nuestro Hogar 3, en las afueras de esta capital y la víctima fue identificada como Gladis Edith Barrionuevo, de 37 años de edad, quien según los médicos, «murió por un paro cardiorrespiratorio por electrocución».

Según trascendió, la mujer estaba regando el césped cuando, por causas que se desconocen, rozó un alambrado perimetral de su vivienda recibiendo una fuerte descarga eléctrica que le produjo la muerte.

La Justicia investigaba esta mañana los motivos por los cuales ese alambre estaba electrificado, aunque todavía no había obtenido respuestas al respecto.

Fuente: www.infobae.com

Un nene murió asfixiado cuando miraba la tele

El pequeño falleció por la humareda que desprendió el plástico de un televisor al derretirse por un cortocircuito. Los padres habían salido a hacer compras por el barrio.

Fue trágica la muerte de un chico en Cipolletti. El niño de tan solo tres años falleció asfixiado en su casa tras inhalar los componentes químicos que despidió el plástico de un televisor al consumirse por un cortocircuito.

La víctima, identificada como Enzo Rincón, se encontraba solo en su casa al momento de registrarse el siniestro. Los padres habían salidos un instante a hacer unas compras en el almacén del barrio.

Según informa hoy el diario El Litoral, el matrimonio volvió una hora después pero ya era tarde. La casa estaba inundada de humo negro y el pequeño muerto detrás de una de las puertas. En ese momento un vecino intentó reanimarlo pero fue imposible.

De inmediato fue trasladado al hospital local donde se determinó que el pequeño había fallecido antes por un paro cardiorespiratorio.

En tanto, los peritos indicaron que el televisor, que estaba encendido, se consumió totalmente sin generar llamas pero sí una intensa humareda.

Fuente: www.infobae.com

Una niña de 7 años sufrió graves lesiones al caer de una terraza

El accidente tuvo lugar en el partido de La Matanza, cuando la menor cayó al vacío desde unos cuatro metros de altura. Su cuerpo al impactar contra suelo sufrió graves lesiones.

Una niña de siete años de edad sufrió graves lesiones al desplomarse desde la terraza de su casa en la localidad de San Alberto, Partido de La Matanza, informó la policía.

El accidente tuvo lugar esta tarde, cuando la niña jugaba en la terraza de su vivienda de la calle Sombra 4.635 del citado barrio.

En un momento dado la niña perdió el equilibrio y cayó al vacío desde unos cuatro metros de altura, donde su cuerpo impactó contra el jardín de la casa.

Según los dichos posteriores del padre de la víctima, » su hija había subido a la terraza, situación que no fue advertida por los mayores de la casa».

En un primer momento la menor fue trasladada al Hospital Paroissien de San Justo, pero esta noche fue derivada al Hospital de Niños de La Plata, debido a la gravedad de su estado.

La causa fue caratulada como «lesiones» con intervención del Juez de Menores en turno del Departamento Judicial de La Matanza.

Fuente: www.infobae.com