México es uno de los países con menos horas de capacitación por año.
CIUDAD DE MÉXICO (MANUFACTURA) — En México mueren al año más de 1,400 personas por accidentes laborales según la cifra más reciente del Instituto Mexicano del Seguros Social(IMSS), parte importante de estas muertes podrían evitarse con una adecuada capacitación en las plantas de trabajo, advierte Humberto Patino, director de capacitación de Expansión Laboral, que imparte cursos de capacitación en las empresas.
De acuerdo con estadísticas oficiales, la mayoría de los accidentes de trabajo ocurren en los primeros años de incorporación de una persona a la vida productiva, es decir entre los 25 y 29 años, y con una antigüedad en el puesto de entre uno y cuatro años.
Entre el grupo de mayor riesgo se encuentran los operadores de máquinas y herramientas, lo que muestra la importancia de ir de la mano con los trabajadores ofreciéndoles una capacitación adecuada sobre el manejo del equipo y soluciones en caso de fallas del mismo.
El resto de las oficios que se encuentran en el grupo de riesgo son los cargadores de mercados sobre ruedas y mudanzas, trabajadores de tiendas de autoservicio (principalmente el personal de almacenes), oficinas, hospitales, hoteles y los albañiles.
La mayoría de estos accidentes (ocho de cada 10) provocan lesiones musculares, sobre todo entre los trabajadores de la industria.
Patiño afirma que para evitar este tipo de situaciones, cada 100 horas de trabajo debe realizarse algún tipo de capacitación (equivalente al 10% de las horas trabajadas) para así no sólo reducir los accidentes de trabajo, sino también para hacer que la gente sea más productiva y se sienta parte del proceso de la empresa. Para tener una idea México es uno de los países con el menor tiempo de capacitación mundial con menos de 30 horas por año, según datos de la Organización Internacional del Trabajo.
De acuerdo con la experiencia de Expansión Laboral, antes de realizar cualquier curso se debe hacer una especie de auditoria del conocimiento para identificar la situación actual de los empleados en cuanto a la función que realizan y sus herramientas de trabajo con el objetivo de medir las necesidades de aprendizaje y actualización. «Esto se llama DNC( detección de necesidades de capacitación). Una vez conociendo ese resultado se debe entonces llevar a la práctica el curso ya aterrizado a las necesidades de la empresa», dice Patiño.
Para que la capacitación sea efectiva, lo más recomendable es revelar los beneficios a corto mediano y largo plazo que se conseguirán con este proceso y realizar en conjunto metas y alcances para la continuidad de la capacitación a fin de que la actualización de conocimientos no sea vista como un esfuerzo aislado y ocasional sino que este esfuerzo sean una actividad regular o, bien, permanente.
También se recomienda tener en existencia un catálogo de oferta de capacitación así como un calendario para proyectar los tiempos y grupos que recibirán la formación.
La capacitación debe realizarse sobre dos ejes, según el experto:
Interno (para mejorar las condiciones de trabajo, competitividad de la empresa y productividad del personal): debe contemplar idiomas, tecnología, servicio al cliente, manufactura y procesos, comportamiento organizacional, valores y hábitos, Management, seguridad e higiene.
Externo (para mejorar la imagen que proyecta la empresa al exterior): mejores prácticas, benchmarking, impuestos, legislación, medio ambiente, globalización y oportunidades de exportación.
Cabe mencionar que una capacitación adecuada no solamente ayuda a disminuir los accidentes de trabajo sino también los pagos al IMSS por este concepto.
Por: Juliana Fregoso
Hoy en día los accidentes del área de trabajo son comunes, de tal manera se debe proteger a los empleados, por lo cual las capacitaciones se vuelven una necesidad pero una excelente inversión pues los empleados están mejor preparados tanto dentro o fuera de instalaciones.