Dos chicos calcinados en accidente como consecuencia de la explosión del equipo para Gas Natural Comprimido

En Panamericana, a la altura de Vicente López, un Peugeot 404 tuvo una falla mecánica, se paró y fue embestido de atrás por otro vehículo. Explotó el tubo de GNC. El dueño no pudo rescatar a sus hijos.

Con episodios como este, se reaviva el debate sobre la seguridad de los equipos de GNC, aunque ya comenzó a regir una nueva reglamentación que obliga el uso de dispositivos de exceso de flujo en las válvulas de bloqueo para los cilindros contenedores y la adecuación a norma de los equipos instalados en 1.500.000 vehículos registrados según información suministrada el ENARGAS, -organismo estatal encargado de controlar la actividad del GNC- y de los cuales poco mas del 70% poseen equipos para GNC compuestos con elementos no homologados o fuera de norma, vale decir, artefactos no autorizados que atentan contra la seguridad pública.

Según testimonios de mas de una veintena de operadores del sistema del GNC, serían casi 2.000.000 los vehículos propulsados a GNC que circulan en Argentina, de los cuales unos 500.000 cargan GNC con obleas truchas o vencidas al amparo por la falta de control y del accionar omisivo de los funcionarios públicos que se desempeñan en el ENARGAS.

El ENARGAS, dependiente de la Secretaría de Energía a cargo del ingeniero Daniel Omar Cameron, en la órbita del Ministerio de Planificación Federal, cuenta con casi 400 funcionarios públicos que deberían estar abocados a la tarea del control de la actividad generada por el uso del gas, pero lamentablemente el control brilla por su ausencia.

La deplorable gestión de quien fuera presidente del directorio del ENARGAS, el pingüino Fulvio Madaro, echado por el presidente Néstor Kirchner por su accionar indebido, al igual que «los renunciados» Carlos Alberto Abalo -asesor de Julio De Vido- y Ricardo Daniel «Pacha» Velasco, permitió la proliferación de graves irregularidades e ilícitos que atentan contra la vida de las personas. Parte de los funcionarios que estaban a las órdenes de Madaro, aún permanecen ajobachados en el ente a la espera de que el interventor, Lic. Juan Carlos Pezoa, decida su incierto destino.

El fatal accidente sucedió en la autopista Panamericana, frente al shopping Unicenter, en el partido de Vicente López. Allí, dos chicos murieron calcinados y otras 10 personas resultaron heridas -una de ellas de gravedad- luego de que el rodado en el que circulaban fue embestido de atrás por una camioneta y el vehículo comenzó a arder, informaron fuentes policiales.

Ocurrió cuando un viejo Peugeot 404 se detuvo por problemas mecánicos sobre el carril lento de la autopista Panamericana y la calle Paraná. Detrás circulaba una camioneta Mercedes Benz Sprinter, que al parecer no pudo frenar a tiempo y se estrelló contra el auto, lo que hizo que éste diera varios trompos y terminara chocando contra un Renault 21, en el carril rápido.

Cuando el conductor del Peugeot bajó del vehículo e intentó sacar a sus pequeños hijos, el tubo de Gas Natural Comprimido (GNC) explotó y se produjo un incendio. Ambos menores murieron carbonizados, pese a la desesperada labor del padre y de otros automovilistas para apagar las llamas y retirarlos. Las edades de estos chiquitos no trascendieron, aunque se informó que venían de jugar un partido de fútbol.

Ninguno de los habitantes de este país, está exento de ser la potencial próxima víctima que cobre el accionar omisivo de los funcionarios públicos que se desempeñan en el ENARGAS, quienes por acción ú omisión, son responsables de la muerte de personas y atentar contra el bienestar general de la población.

Roberto Medina

Falleció un operario que quedó atrapado en una prensa

Un operario de una fábrica metalúrgica de la zona sur perdió la vida esta madrugada debido a las serias heridas provocadas al quedar atrapado por una prensa que manipulaba.

Según indicaron hoy fuentes policiales, a las 4.15 ingresó al hospital de emergencias Clemente Alvarez Marcelo M., de 25 años, con un severo traumatismo de cráneo y lesiones en el parietal derecho.

El joven trabajaba en una empresa metalúrgica dedicada a la fabricación de bulones de acero ubicada en Ovidio Lagos al 6300 y en un momento determinado fue atrapado por la prensa, que le provocó serias heridas en la cabeza.

Pese a los cuidados recibidos, el joven falleció a las 5.10.

Fuente: www.lacapital.com.ar

Un obrero sufrió heridas al caer 8 metros desde un andamio

Un obrero de la construcción sufrió esta mañana heridas de diversa consideración al caer desde un andamio de un edificio en construcción ubicado a ocho metros de altura a un pasillo lindero, según indicaron fuentes policiales.


El operario cayó desde una altura de ocho metros.
Imagen: Celina Mutti Lovera

El hecho se produjo alrededor de las 10 en un edificio en construcción que se levanta en San Juan al 2500 cuando Marcelo O., de 25 años, se encontraba trabajando sobre un andamio que aparentemente no reunía las condiciones de seguridad necesarias.

La estructura habría cedido y el obrero se precipitó a un pasillo lindero desde unos 8 metros. Los vecinos llamaron de inmediato a los bomberos y una ambulancia del Sies trasladó al herido hasta un centro asistencial.

Interviene la seccional 6ª por razones de jurisdicción.

Fuente: www.lacapital.com.ar

Una explosión causó quemaduras a un joven

Tiene 27 años y trataba de reparar cables de una tapa de luz en 1º de Mayo, esquina San Luis.

Sebastián no la sacó barata. Un fuerte fogonazo originado en una tapa de energía eléctrica correspondiente a un solarium de 1º de Mayo y San Luis le provocó ayer por la tarde quemaduras de primer y segundo grado en el rostro, cuero cabelludo y manos. Si bien las causas se tratan de establecer, el accidente produjo zozobra entre los vecinos de esa esquina rodeada de edificios por el estruendo que generó el desperfecto eléctrico. Al lugar se hizo presente una ambulancia del Sistema Integrado de Emergencia Sanitaria (Sies) que trasladó al joven de 27 años al sanatorio Británico.

Todo ocurrió hacia las 17, cuando aparentemente el muchacho pretendía arreglar un inconveniente con la bajada del servicio eléctrico hacia el medidor del solarium Martinâ??s Sun, ubicado en San Luis 498. En la puerta del local y ya pasado el accidente podía leerse la inscripción â??cerrado por falta de energíaâ??, sin nadie en su interior.

Estruendo. Según narraron vecinos del lugar, primero se escuchó una explosión y de inmediato se advirtió que el joven fue alcanzado por el fogonazo en el rostro, cuero cabelludo y ambas manos. Fuentes del Sies indicaron que el paciente fue identificado como Sebastián Messio, de 27 años, quien fue trasladado al Sanatorio Británico de inmediato por una ambulancia.

El director del Centro del Quemado y Cirugía Plástica, Osvaldo Freddi, indicó a Laâ??Capital que el joven presentaba â??quemaduras de segundo grado en rostro y ambas manosâ??, por lo que quedó internado en este sector. Anoche se le colocaron compresas en la zona afectada y se le practicaron una serie de estudios y análisis para determinar la profundidad de las quemaduras.

Por lo que pudo relatar Sebastián, al manipular una pinza para reparar unos cables que empalmaban con la bajada de luz de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), se produjo un fogonazo al hacer masa con la electricidad de la calle. El solarium ocupa la ochava noreste de San Luis y 1º de Mayo y ayer, luego de haberse registrado el episodio, permaneció cerrado.

A mediados de este mes, un hombre que vivía en una humilde vivienda en Granadero Baigorria falleció calcinado al incendiarse las mantas con las que se cubría para dormir. El albañil, de 57 años, había usado ladrillos refractarios apoyados sobre una resistencia para calentar el ambiente.

Se presume que el calor del ladrillo o algún cortocircuito hicieron que algunas prendas comenzaron a incendiarse y luego se propagaron sobre las frazadas que lo cubrían.

Se trata sólo de un antecedente más de los efectos peligrosos que produce la manipulación de fluido eléctrico en forma precaria.

Fuente: www.lacapital.com.ar

Una explosión le amputó la mano izquierda a un minero

José Humberto Mota, de 56 años, perdió su mano izquierda, a la altura del antebrazo. Reside con su esposa y siete hijos en el municipio de Buenavista (Quindío).

Tres dedos de la mano derecha también fueron afectados por la explosión de un artefacto por determinar.

Mota, quien se dedica a la extracción de oro, se encontraba en el Río Quindío, en el sector de Maravelez.

Según su narración, al revisar un cajón que había dejado en el río encontró un tarro con una piola, el cual tomó en sus manos y al halar la piola explotó.

Fue sometido a varias intervenciones quirúrgicas. Según el parte médico, la explosión no le causó daños neurológicos ni de la visión y sería dado de alta en las próximas horas.

Fuente: www.eltiempo.com

Un accidente en la factoría de Ence provoca tres heridos graves

Realizaban un trabajo mecánico rutinario, de mantenimiento, en orden a retirar una bomba dañada. En la maniobra de reparación, extrajeron una válvula por la que fluye ‘licor negro débil’, que los trabajadores de la papelera que Ence tiene ubicada en Lourizán (Pontevedra) emplean para lavar la madera. Sin embargo, por causas que aún se investigan, el líquido siguió emanando y se derramó a unos 84 grados de temperatura sobre el cuerpo de tres operarios. Al cierre de esta edición, permanecían ingresados en la clínica Povisa de Vigo con pronóstico grave y entre un 5 y un 15 por ciento de sus cuerpos abrasados.

Las quemaduras fueron tratadas en un primer momento, según explicó el delegado sindical de CC.OO. en Ence, Francisco Luís López, con un producto nuevo cuya eficacia está probándose ante percances como el registrado en torno a las 10.30 horas de ayer. Los servicios de Urgencias recibieron la llamada de un enfermero de la factoría, ante la gravedad de las heridas, de primer y segundo grado, que presentaban A.C.V. -con un 15 por ciento de su superficie corporal quemada-; F.B.F., con el 10 por ciento afectado; y M.B.S., con un 5 por ciento, según el parte médico facilitado por el hospital. Reunidos de urgencia por la tarde, el comité de Seguridad de la pastera y los delegados sindicales de los trabajadores decidieron abrir una investigación que determine por qué se produjo el escape y repararlo de la manera oportuna.

Fuente: http://actualidad.terra.es