El gobernador bonaerense, Felipe Solá, instó a que se apruebe de forma urgente el proyecto que penaliza las bromas a la línea telefónica de emergencias habilitada hace un año en la provincia.
El gobernador bonaerense, Felipe Solá, reclamó hoy la urgente aprobación del proyecto de ley que pena a los bromistas que llamen a la línea de emergencias 911 advirtiendo la comisión de delitos inexistentes, y atribuyó esas llamadas a la «bronca natural» contra la policía.
El mandatario provincial también consideró que puede haber delincuentes que «saturen» con falsos llamados la línea policial con el fin de cometer delitos.
En declaraciones que publica el diario Hoy, Solá expresó que «necesitamos que la Legisatura actúe con mayor celeridad en el tratamiento y la aprobación de esta ley», que pena con multas de entre el 20 y el 60 por ciento del haber mensual de un policía y de 10 a 30 días de arresto a quien haga uso indebido del servicio telefónico gratuito de emergencias.
La iniciativa también prevé la inhabilitación de la línea telefónica usada por los bromistas hasta 90 días y la clausura del local donde esté instalada la línea telefónica, si el llamado falso se realiza desde allí.
En la actualidad, medio centenar de personas es investigado por la Justicia penal y varios juzgados de faltas bonaerenses, acusadas de realizar bromas o falsas denuncias al servicio de emergencias.
La línea 911, durante el primer año de funcionamiento, recibió algo más de 8 millones de comunicaciones, y se estima que entre un 80 y un 85 por ciento, correspondió a llamadas hechas por bromistas.