La explosión de un caldero de una sauna en Puntiti Grande en Sacaba, el viernes, dejó 45 viviendas afectadas desde los muros y al menos 11 tendrán que ser reconstruidas. Ayer, los pobladores seguían esperando que el propietario del balneario cubra los gastos.
El sonido se escuchó a más de un kilómetro y las casas más cercanas sufrieron daños de consideración.
“Estábamos trabajando y de repente pensamos que era una bomba, dinamita. Todo revienta y vimos caer del cielo escombros, madera y cuando vinimos a ver había muros caídos. Todo se reventó, supuestamente, por un descuido del sauna y reventó con el aire caliente”, contó el dirigente Mauricio Claros.
Dos días después, los vidrios de las casas siguen destrozados. A más de 10 metros, se encuentran fragmentos de mallas.
El dirigente de la OTB Puntiti Grande, Mauricio Claros, contó que se realizó un relevamiento de datos y que se prevé hacer otro.
“El propietario se comprometió a reparar todos los daños, esperemos que sea así. Nosotros vamos a velar también por los vecinos de la zona, vamos a realizar el seguimiento”, argumentó.
Según Claros, el viernes, un grupo realizó una fiesta privada en el balneario y, cerca de las 18:00, estalló uno de los garrafones. Dijo que hay unos dos heridos.
No se conoce el nombre del balneario. Tampoco se sabe si cuenta o no con licencia de funcionamiento.
El intendente de Sacaba, Jhony Sánchez, dijo que fueron al lugar, pero no lograron dar con el propietario. “No sabemos si se están escondiendo de nosotros o no, pero vamos a insistir y averiguar sobre la licencia. Claro, hay sanciones si no se cuenta con el permiso”, recalcó.