APROXIMACIÓN AL INCIDENTE CATASTRÓFICO OCURRIDO EN LA PLANTA TERMOELECTRICA TACOA EL 19 DE DICIEMBRE DE 1982. NUNCA MAS!
Eric Omaña, profesor universitario de seguridad y salud en el trabajo
INTRODUCCIÓN Y PRESENTACIÓN
En 1982 ocurrió en el sector eléctrico, concretamente en la Planta Termoeléctrica Tacoa, de propiedad privada, un incidente con dos fatalidades, que por mal manejo del evento se transformó en catastrófico, con un total de 154 personas fallecidas, reconocidas oficialmente, número que puede ser mayor, dado las personas de la comunidad que desaparecieron en ese momento.
En esta presentación, utilizando los extractos del informe de la comisión investigadora, las declaraciones de personeros del gobierno de Luis Herrera que estuvieron en el lugar, de bomberos, de ex-funcionarios de la empresa Electricidad de Caracas y de otros aportantes, como periodistas y el propio instituto de formación de bomberos, hoy parte de la Universidad de la Seguridad, se ha triangulado la información para tratar de esclarecer el primer incidente, que causó la muerte a dos trabajadores de Tacoa, y para explicarnos la cadena de eventos previos que se desarrollaron para que en un segundo incidente, horas después del primero, se produjera la catástrofe.Todo eso para exclamar, además de justicia, que nunca más pase algo así.
EQUIPOS DE INVESTIGACIÓN
Hace 33 años ocurrió el mayor accidente industrial ocurrido en Venezuela en todos los tiempos. El Presidente Luis Herrera nombró una Comisión Asesora Presidencial para su investigación integrada por el Comisario Gabriel Lugo Lugo, Director de la PTJ, responsable y vocero de la misma, el Abogado Asdrúbal Aguiar, Asesor Jurídico, los Comisarios de la PTJ, Eleazar Cutto Rondón y Eduardo Rojas Ochoa, los Comisarios de la Disip, Pablo Simoza y Camilo Cusatti, el coronel Luis José Rodríguez Salazar del Ministerio de la Defensa, y Representantes de Lagoven y Maraven (Brígido Natera), Cadafe y Bomberos. Una segunda comisión actuó, de carácter técnica pero prácticamente su trabajo nada tuvo que ver con la presidida por la PTJ, la misma estuvo integrada por Lic. Wintila Guacarán, Directora General Sectorial de Previsión Social del Ministerio del Trabajo, Srs. Ángel Parejo y Omar Cardozo de Lagoven, Técnico José Espinoza Departamente de Seguridad Industrial, Ministerio de Energía y Minas, Ing. Perla Putterman, Comisión Nacional de Normas Industriales (Covenin), Ing. Eric Omaña, Programa de Higiene Ocupacional del Ministerio de Sanidad, Sr. Ángel Freites, Cuerpo de Bomberos del Distrito Federal y Lic. Alfredo Miuller, Dirección de Medicina del Trabajo, IVSS. Lo rescatable de esta comisión que trató de modificar el Reglamento de las Condiciones de Higiene y Seguridad en el Trabajo e inició el desarrollo de normas técnicas en materia preventiva que prácticamente no existía como política nacional.
RESUMEN DEL INCIDENTE
En la madrugada del 19 de diciembre de 1982 se produjo la explosión del tanque N° 8, de la termoeléctrica “Ricardo Zuloaga” ubicada en Tacoa, contentivo de Fuel Oil N° 6, un combustible tan pesado que requiere calentadores para aumentar su capacidad de fluidez y poder movilizarlos, esta explosión causó la muerte a dos trabajadores y un incendio que se desarrolló durante toda la mañana hasta que en horas del mediodía, como consecuencia de un fenómeno poco estudiado para la época, el boil over o superebullición del vapor de agua, se generó una segunda explosión que lanzó por los aires una lluvia de combustible encendido, una onda calórica y una sobrepresión, que causó la explosión e incendio del tanque N° 9 y muerte a 152 personas más.
La causa inmediata de la primera explosión fue, según la comisión investigadora, el “encendido de un fósforo”, obviando otras situaciones como el funcionamiento anormal de los calentadores del tanque N° 8 el día y noche anterior al incidente, en momentos en que se bombeaba Fuel Oil N° 6 a los tanques N° 8 y N° 9.
Entre las causas contribuyentes destaca que el sistema de combate de incendios no funcionó, no había espuma en planta, y tampoco había agua para diluirla, era baja la presión en los hidrantes, no se drenaba el agua del tanque N° 8, se desconocía el boil over y era total la carencia de planes para este tipo de incidentes.
Las causas raíces apuntan hacia una empresa que no valora el mantenimiento del sistema de combate de incendios, la preparación del personal para grandes incidentes, y principalmente, el diseño de la planta en un espacio incompatible para ello.
DAÑOS HUMANOS Y MATERIALES
Según el informe de la Comisión Asesora del accidente de Tacoa, como resultado del siniestro fallecieron 154 personas, quedaron 300 damnificados y ocurrieron pérdidas por el orden de 11 millones dos cientos once mil de bolívares, sin incluir las propiedades dañadas de la C.A. Electricidad de Caracas, estimadas 2,5 millones de dólares del momento. [9]
Nada dice el informe sobre impacto en la generación de energía eléctrica como consecuencia del incidente ni de los daños al ambiente, al menos en su cuantificación, porque la memoria fotográfica existente demuestra que los hubo.
LINEA DE TIEMPO
1970 Son construidos los tanques N° 8 y N° 9 para almacenar Fuel Oil N° 6 (combustible de alta densidad que requiere calor para ser movilizado) cumpliendo con la Norma estadounidense NFPA N° 30, separados a 300 m, con techo cónico débil y venteador para desalojar los vapores emanados, fosas (diques) adecuadas, con sistema de extinción a base de espuma, detección neumática, sistema de enfriamiento y tres (3) monitores de 500 GPM cada uno [1].
25-2-1980 La Gerencia de Ampliación de Planta Tacoa, recibe un informe preparado por el ingeniero Antonio José Monagas Moya, demandando aumentar la seguridad: colocar hidrantes, disponer de comunicación entre la detección de fuego y calor con las cónsolas de planta, adquirir un camión químico (espuma) y tener un plan de acción ante incidentes [2]. Ese año este ingeniero deja la empresa.
18/12/1982 Buque tanque Murachi de Maraven está listo en la boya para iniciar descarga de Fuel Oil N° 6 a los tanques N° 8 y N° 9.
18/12/1982 A las 11:30 pm se reportó temperatura alta en el tanque N° 8, la señal se activa a 80 ºC y se indicó una temperatura de 88 ºC. Se despachó un mecánico al tanque N° 8, cerrando uno de los calentadores en operación, bajando así la temperatura a normal 80 ºC. La situación había sido reportado en la mañana pero no se había tomado ninguna acción. [1] [3].
19/12/1982 5:45 am. Se despacha a tres hombres para aforar el tanque N° 8, dos suben al techo, el tercero se quedó en el vehículo dentro del dique. A los dos minutos ocurrió una explosión violenta. Fallecen Luis Natera (25 años), operador de primera, y José Manuel Rodríguez (19 años), operador auxiliar; el conductor, Alexis Alzaul logra milagrosamente salvar la vida (al escapar por el drenaje del dique). [4]
En la siguiente hora van arribando bomberos, primero de la estación Carayaca, luego de Vargas y Caracas para encontrarse que el nivel de presión en los hidrantes, era insuficiente (60 a 80 libras), había derrame de “petróleo” en las calles y desfiladeros, lo cual impedía el desplazamiento a pie y en los vehículos, además angosta de la vía interna impide maniobras con los camiones tanque, especialmente el camión para la inyección de espuma. Igualmente detectan que la empresa no tiene agua en los tanques del sistema de extinción de incendios ni espuma para añadírsela. [1], [5], [6] [7].
Desde un helicóptero Ibrahim Ferrer de Lagoven asesora como atacar el incendio (enfriar paredes). Morirá luego de bajar del helicóptero con la segunda explosión.
10:30 am El Ministro del Ambiente se retira al ver que son inútiles los esfuerzos de personal de planta y bomberos soldando tuberías para enviar agua al sector caliente, ante el peligro de ignitar el combustible que se apreciaba en el ambiente. Había visto llegar cilindros con espuma, al igual que Tito Alvarez, Alcalde de Vargas [8].
11:45 am (aproximadamente) Segunda explosión del tanque N° 8 por boil over, que hace explotar e ignitar al tanque N° 9. Comienza la tragedia humana.
BOILOVER [13]
El primer boilover conocido, y en serie, por darse en un patio de tanques de crudo ocurrió en la Bahía de Monterrey (EEUU) 14/9/1924, cuando un anque -sin techo- de almacenaje de petróleo contentivo de 8.700 m3 de Standard Oil Co recibe la descarga de un rayo.
H. Hall (EEUU) 1925. Hace 100 pruebas a gran escala. Concluye que se requieren tres condiciones para el boilover: un tanque abierto, petróleo para que, por las diversas densidades de sus componentes, pueda viajar una onda calórica y agua.
Otros investigadores (L. Burgoyne, 1947; Blinov y Kodiakov, 1961;) coinciden en que con petróleo las fracciones más livianas se queman o destilan y las más pesadas y calientes bajan, esto se conoce como intercambio de capas frías por capas calientes, formando la onda de calor convectiva que viaja a 1 metro/hr.
Tacoa, 1982. Cambia la teoría que solo petróleo puede hacer boilover, sino que un combustible muy denso también podía hacer boilover. La primera explosión vuela el techo del tanque. El consumo de Fuel Oil N° 6 o Bunker “C” provino durante muchos años de diferentes proveedores; eso generó las diversas densidades para que viajara la onda calórica. La falta de drenaje del tanque N° 8 aportó el agua para el volcán que “erupcionara” en horas del mediodía. Habían pasado 6 horas desde que el Fuel Oil N° 6 empezó a quemarse, el tanque no tenía techo, la onda calórica viajó a través de las diversas capas del combustible y había agua en el fondo. Tacoa cambió la percepción de que solo los crudos podían hacer boilover.
ALGUNOS APORTES PARA LA INVESTIGACIÓN RETROSPECTIVA
Las actuaciones promovidas por la Comisión Asesora del Accidente de Tacoa apuntó desde el primer al último momento en que la causa del fuego inicial fue “un fosforo, un yesquero” [9], y que, uno de los fallecidos era fumador, sin decir, directamente que el hombre encendió su cigarro, pero indirectamente toda la opinión pública lo interpretó así.
21/12/1982: Los dirigentes sindicales Fray Ávila, José Rodríguez Medina, José Luis Hernández, Juvenal Cadenas y Manuel Pérez, repudian en El Nacional la opinión de la Comisión PTJ porque “los trabajadores estamos muy bien entrenados para cumplir con las normas de seguridad industrial”, “hasta los mismos trabajadores se les registra totalmente para entrar al área. Prohibido fumar, ingerir bebidas alcohólicas durante el trabajo y en el sitio de labores” [10].
06/01/1983: El periodista de El Nacional, Luis Buitrago Segura indicó que el Juez Primera Instancia en lo Penal de La Guaira, Carlos Soucre, estaba por recibir el expediente del caso de manos de los fiscales designados por el Ministerio Público, apuntando los fiscales hacia el tema de la negligencia por parte de funcionarios de la empresa.
La Jueza Superior XIII Penal, Dra. María Teresa Salazar de Rodríguez Corro, dicta autos de detención a los funcionarios de la Electricidad de Caracas: César Augusto Ramírez, Gerente de Seguridad Industrial, Foción Augusto Contreras Gerente de la Planta, Salvador Mario de Armas, Alfonso Celda Contreras, Valdemar Enrique Fuentes y Ángel Soto, por los delitos probados de “incendio, homicidio culposo, previstos en los artículos 357 y 411 del Código Penal” [11].
Días antes de dictarse los autos, este personal es sacado al exterior y no regresará hasta que la misma Jueza, cierre el caso en abril de 1985, basada en el informe de la PTJ y su teoría “exculpadora del fósforo”. Las evidencias sobre temperaturas anormales en el tanque N° 8 y los fallos en mantenimiento del sistema de combate de fuegos se obviaron. La negligencia fue borrada del caso.
6/1/1985 EdeC publica aviso en diarios de circulación nacional a página completa, con letras gigantescas tituló: “La verdad sobre Tacoa. Así es y así funciona la planta “Tacoa”. En el medio, una foto aérea de la planta sin la zona de viviendas. [12]. Esto marcó el inicio de olvido de Tacoa y el cierre del caso, que aún mantiene la herida de miles por las pérdidas de sus seres queridos.
ANÁLISIS A MANERA DE CONCLUSIONES
El origen de la primera explosión nunca se pudo determinar, aunque la PTJ insistió en su informe en el encendido de un fósforo, un yesquero…
Se obviaron en la investigación de la primera explosión, el sobrecalentamiento del interior del tanque N° 8, así como el aumento de la evaporación de solventes producto de turbulencia generada por el bombeo y el eventual uso, por parte del personal, de equipos que no eran a prueba de explosión.
Se obvió igualmente que pese a ser de reciente construcción todo el sistema contra incendios no funcionó por tener componentes oxidados y porque además no había agua, que 3 tanques que debían contener 1,2 millones de litros de agua, estaban vacíos, en consecuencia no había presión en los hidrantes y que además no había espuma [2], [6].
Se obvió la ausencia de planes de acción ante incidentes de gran magnitud.
Tanto la Comisión Asesora como la “justicia” del caso actuaron como debe ser en un Estado burgués, apuntar a la responsabilidad del más débil, los dos trabajadores fallecidos, que en consecuencia no se podían defender, y disolver cualquier evidencia de la negligencia, de la omisión, de la acción errática y hasta de la impericia de la representación de la empresa involucrada en el mantenimiento del sistema de extinción de incendios.
RECOMENDACIONES
El Informe de la Comisión recomendó crear estructuras organizativas e instrumentos legales para atacar este tipo de problemas de seguridad, revisar los aspectos legales sobre el manejo, almacenamiento y uso de sustancias y materiales peligrosos, sin considerar que desde 1968 existía el Reglamento de las Condiciones de Seguridad, que contenía y contiene, parte de los aspectos que fueron violados por la empresa C.A. Electricidad de Caracas. Igualmente recomendó que se instruyera al despacho competente para que verifique las condiciones operacionales del complejo eléctrico Arrecife-Tacoa, de acuerdo a los manuales de operación y mantenimiento, con el objeto que se cumplan las condiciones de diseño [9]. Es la única parte del resumen ejecutivo en que los miembros de la comisión dejan ver que posiblemente hubo fallas relacionadas con el diseño y operación de la planta Tacoa, pero más nada.
En la Tacoa actual está vigente verificar y actualizar las condiciones operacionales del sistema de extinción de incendios. Es esa y no otra, la principal recomendación sobrevenida de este escueto y retrospectivo análisis.
FUENTES DE INFORMACION
[1] Boletín Informativo CUERPO DE BOMBEROS DEL DISTRITO CAPITAL. Instituto Universitario de Tecnología Bomberil . Diciembre, 2009. División de Extensión Universitaria (iutbdeu@gmail.com)
[2] “Tacoa: una catástrofe anunciada”. Cobertura de la comparecencia del Ing. Antonio Monagas ante la Comisión del Congreso nombrada para investigar el accidente de Tacoa. El Nacional 18Enero1983. Pag D-14
[3] Datos del periodista Humberto Álvarez sobre anormalidad en los calentadores de los tanques de Tacoa el día 18/12/1982. El Nacional 7Enero1983. Pag D-19
[4] Entrevista a Alexis Alzaul en http://www.correodelorinoco.gob.ve/tema-dia/a-28-anos-tragedia-tacoa-todavia-no-se-conoce-como-se-origino-fuego/
[5] Entrevista a Roberto Nuñez Rodríguez, Héroe de Tacoa, realizada por el Bombero UCV Voluntario Elio Pimental en los 28 años de la tragedia de Tacoa para la lista de discusión red_seguridad_y_salud_ocupacional@yahoogroups.com
[6] Declaración de Enrique Bart, del Colegio Nacional de Bomberos en Foro la “Tragedia de Vargas” sobre “fallas de seguridad y de mantenimiento en los sistemas de extinción de incendios”. El Nacional 19Enero1983. Pag D-19
[7] Declaración del Comandante de los Bomberos del D.F. Teniente Coronel José Antonio González Balsa en “Hipótesis de los bomberos: La falta de drenaje convirtió a los tanques en calderas”. El Nacional. 23Dic1982. Pag. D-26.
[8] Declaración del Ministro del Ambiente Carlos Febres Poveda: “A las 10:30 no había remedio”. El Nacional. 5Enero1983. Pag. D-3
[9] Extractos del Informe de la Comisión Asesora del Accidente de Tacoa. El Nacional 15/12/1983
[10] Declaración de sindicalistas rechazando que uno de los primeros fallecidos era el responsable de la primera explosión. (JRD, El Nacional 21Dic1982 Pag. C-2)
[11] Dictado autos de detención por el caso Tacoa. El Nacional, 19Dic1984 pág. D-10.
[12] Aviso de la EdeC en el Diario El Nacional. La verdad sobre Tacoa. 6Enero1985
[13] Garo JP, Koseki H, Vantelon J y Fernández-Pello C. COMBUSTION OF LIQUID FUELS FLOATING ON WATER. Thermal Science International Scientific Journal (2007), 2, pp. 119-140
EN MEMORIA DE AGUSTÍN ROJAS RODRIGUEZ
Eric Omaña. Lea el Boletín PLURAL-UCV en: http://plural-ucv.blogspot.com/
