¿Quién? ¿Cómo? ¿Porqué? Son las tres preguntas que se deben hacer a la hora de analizar un accidente de trabajo.
Un accidente se puede entender como una cadena de eventos que se produce en el entorno de determinado conjunto de condiciones ambientales y que terminan produciendo daños a algo o alguien.
De este concepto de accidente hay dos elementos que se deben rescatar, una es la cadena de eventos, es decir, la historia o relato de ese accidente, y la otra es la cadena causal.
¿Quién produjo el accidente? Esta pregunta se responde simple. El peligro, quien es el único que tiene la capacidad de producir daño, y cada accidente está asociado a un solo peligro.
¿Cómo se produjo el accidente? A esta pregunta la responde la cadena de evento, es decir, la historia detrás del accidente. Hay una sola historia que se puede construir detrás de un accidente.
¿Porqué se produjo el accidente? Quizás sea la pregunta más importante detrás de un proceso de análisis. La cadena causal es la respuesta, que también en única.
No hay dos accidentes que repitan la misma cadena de eventos, aunque puedan parecerse las historias, y no hay dos accidentes que compartan la misma cadena causal, aunque las causas puedan ser las mismas.
Cada accidente es único y su ADN lo constituyen la cadena de eventos y la cadena causal que lo caracteriza.
Ing. Néstor Adolfo BOTTA
Rosario – 25/08/2021