Reacción química- Efe. Madrid
27-01-2011
Un cigarro encendido y los vapores de la acetona han sido suficientes para provocar una explosión que podría haber resultado mortal: una joven de 19 años permanece en la Unidad de Quemados del Hospital de Getafe con el 30 por ciento de su cuerpo quemado al sufrir un estallido mientras se limpiaba las uñas en una pensión de Legazpi.
Una joven de 19 años se encuentra grave con quemaduras de segundo grado en el 30 por ciento de su cuerpo causadas por una explosión que se produjo al quitarse el esmalte de las uñas con acetona mientras fumaba. Sin embargo, su vida no corre peligro, según Emergencias Comunidad de Madrid.
El accidente tuvo lugar a las 21:30 horas del miércoles en una vivienda del número 6 de la plaza Beata Mariana de Jesús, situada en el madrileño barrio de Legazpi. Hasta el lugar se desplazó una patrulla de la policía local y una UVI del SUMMA que ha comprobado que la joven presentaba quemaduras de segundo grado en la cara, tórax, piernas y manos. Según Emergencias de la Comunidad de Madrid, ese tipo de siniestros tienen lugar en habitaciones sin ventilación cuando los vapores de la acetona entran en contacto con una brasa o una llama, y son más habituales en el caso de los productos inflamables que se usan para encender una chimenea, por ejemplo.
La propietaria de la pensión en la que sucedieron los hechos, Mariana de Jesús, ha relatado a Efe-Televisión que oyó gritos en un momento determinado, y que la joven salió corriendo hacia al baño para mojarse, con quemaduras en el pelo, la cara y las manos. Su pareja, un hombre algo mayor ha sufrido quemaduras de carácter leve en las manos al intentar ayudar a la víctima a apagar el fuego.