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Un joven se incineró por una explosión en el Parque

La víctima, de 21 años, se introdujo en la Casa de la Cultura Municipal, ubicada en avenida Benjamín Araóz al 500, cuando se produjo el incidente. Un estudiante de Odontología lo auxilió.

Una explosión ocurrida en una subestación transformadora ubicada en el Parque 9 de Julio dejó como saldo un joven con quemaduras en el 95 por ciento de su cuerpo. La víctima, quien está internada en el hospital Centro de Salud, se halla en delicadísimo estado, por la gravedad de sus heridas.

Aproximadamente a las 9.55, Ricardo Damián López se introdujo en el interior de la Casa de la Cultura Municipal, ubicada sobre el Parque, en avenida Benjamín Aráoz al 500. Voceros oficiales indicaron que hizo sus necesidades en el lugar.

De acuerdo al relato de la víctima en la guardia del hospital, no veía nada y encendió un papel. En ese momento se produjo la explosión.

Por el lugar pasaba Fernando Arcángel Pérez Ramírez, quien salía de su clase en la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de Tucumán. Escuchó gritos y se acercó al inmueble.

Al comprobar que las llamas cubrían a López, pateó la puerta y logró sacarlo. Con su guardapolvo pudo extinguir el fuego; llamó desde su celular al 107 y una ambulancia de la Asistencia Pública llegó al lugar en cinco minutos, para trasladar a la víctima al Centro de Salud.

Daniel Pero, coordinador del Servicio de Emergencias del Centro de Salud, informó que López sufrió quemaduras en casi la totalidad de la superficie de su cuerpo. «Por la extensión y la profundidad de las lesiones, su estado es gravísimo», informó el profesional al mediodía.

Comentó que la víctima ingresó al hospital en estado lúcido y que se encuentra internada en terapia intensiva.

Personal de la Seccional Once, a cargo del oficial Juan José Alcocer, cerró las adyacencias a la Casa de la Cultura Municipal con una cinta. Se dio intervención a especialistas de EDET y de las direcciones de Espacios Verdes y de Defensa Civil municipales, quienes revisaron el sitio y evaluaron los daños.

Estos funcionarios informaron a EL SIGLO que esta subestación -perteneciente a la prestadora de energía- abastece a parte del alumbrado público del Parque 9 de Julio y una bomba de agua ubicada en el lago San Miguel. Añadieron que la parte posterior es utilizada por la Dirección de Cultura del Municipio para diferentes actividades.

En cuanto a la explosión, se presume que fue causada por gases, aunque ello será motivo de pericias.

Llamó la atención que no existiera ningún cartel en el inmueble que advirtiera sobre el peligro.

Por Mario Endrizzi

Fuente: www.elsigloweb.com

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