Un joven fue aplastado por la camioneta que usaba para repartir gaseosas. Intentaba cambiar un diferencial cuando se corrió el soporte. No resistió.
SIN ESCAPE. Luis Putelli sobrevivió varios minutos luego de ser rescatado por su padre y un empleado. Sin embargo las heridas que sufrió provocaron consecuencias irreversibles.
No era la primera vez que Luis Putelli reparaba el diferencial de esa vieja Ford doble cabina modelo 70 que usaba para repartir gaseosas. Tampoco era la primera vez que, para sostener el vehículo, usaba una resistente tapa de una máquina similar a un medio tacho de 200 litros. Esa misión había encarado ayer en la tarde cuando el improvisado soporte se corrió y todo el peso de la camioneta cayó sobre el pecho de Luis. Y no hubo escapatoria.
«Cuando lo sacamos estaba vivo, no decía nada pero respiraba y tenía pulso. Lo que pasa es que la ambulancia no vino nunca más y quedó ahí… parece que se asfixió. Como 20 veces reparamos ese diferencial así y nunca pasó nada, no entiendo cómo pudo correrse esta tapa… Dios mío», alcanzó a decir, quebrado, Soar Putelli, el padre de Luis.
Tenía 28 años Luis, era papá de dos nenes de 4 y 2 años, y vivía en el barrio Foeva, Rivadavia. El reparto de gaseosas era un negocio que compartía con su padre, aunque Luis era quien más horas y esfuerzo le metía para sostenerlo, aseguró el padre de la víctima.
Todo pasó minutos después de las 18 en el lugar de trabajo de Luis, una bodega que por estos días no funciona en el 198 Oeste de la calle República del Líbano, una cuadra al Oeste de Mendoza, en Rawson.
A la hora del siniestro en el lugar también había otro empleado que limpiaba botellas cuando escuchó el estruendo. Corrió, igual que el padre de Luis, y trabajaron bastante para sacarlo. «Creíamos que estaba bien», dijo el hombre.
El caso es investigado por policías de la Comisaría Sexta de Rawson. Allí se encargaban de tomar testimonios y recopilar las demás pericias necesarias para que el juez correccional en turno evalúe si el caso debe o no ser archivado.
EDUARDO MANRIQUE – DIARIO DE CUYO