El accidente ocurrió el 5 de julio pasado cuando se realizaba un tendido de cloacas en Granadero Baigorria. Un operario de 19 años murió aplastado al desmoronarse una zanja de cuatro metros de profundidad.
Cuatro empleados de una empresa constructora fueron procesados como presuntos responsables de homicidio culpuso por la muerte de un obrero que pareció a principios de julio sepultado por el derrumbe de una zanja en la que trabajaba. El accidente se produjo en una obra de cloacas que se realizaba en la Ciudad Deportiva de Rosario Central ubicada en Granadero Baigorria.
Según un adelanto del programa La mañana rosarina de La Tres, el accidente se produjo el 5 de julio pasado. La víctima se llamaba Mario Ares, tenía 19 años y perdió la vida al quedar sepultado por una montaña de tierra mientras relaiza una zanja de más de cuatro metros de profundidad para una obra cloacal en la Ciudad de Deportiva de Rosario Central.
El accidente fatal se produjo cuando tres obreros contratados por la empresa RB Obras y Servicios, que tenía a su cargo los trabajos de cloacas en Granadero Baigorria, trabajaban enterrando caños en una zanja que pasa por el interior del club.
La jueza correccional Nº 1 de Rosario, Georgina Depetris, dictó los procesamientos por homicidio culposo (martar sin intención) para el ingeniero que era jefe de la obra, el capataz, el encargado de higiene y seguridad y para el jefe de producción de la mencionada empresa.
Mario Ares era padre de una criatura de ocho meses. Estaba trabajando en el interior de la zanja. Mientras sus compañeros movían unos caños, una pared de tierra cayó sobre Ares sin darle tiempo a escapar. Ares vivía en el barrio San Fernando de Granadero Baigorria.