Obreros trabajando con peligro de caídas al vacío por no usar arneses o porque teniéndolos no los usan o lo hacen deficientemente y ausencia de barandas protectoras son las faltas más comunes detectadas en más de medio centenar de obras inspeccionadas en nuestra ciudad por la Coordinación de Higiene y Seguridad Laboral.
Estas inspecciones, que comenzarán también hoy en la capital provincial, continuarán por una semana más en el Gran Rosario, se informó oficialmente hoy.
El operativo de control de seguridad comenzó la semana pasada en Rosario, donde hay actualmente más 400 obras en ejecución y de las cuales 52 fueron inspeccionadas, tres de ellas en el cordón industrial.
Las faltas más frecuentes que se encontraron fueron: falta de barandas perimetrales, en especial sinefas y rodapiés (barandas del medio y de abajo); falta de barandas en huecos interiores, o inadecuadas, en sitios destinados a ascensores o montacargas, u obreros con falta de arneses o que teniéndolos, no están atados o están mal atados.
También obreros trabajando en carga y descarga de materiales sin protecciones contra caídas; riesgos eléctricos, como cables mal instalados o en el paso, puente sobre los disyuntores, y no continuidad de la puesta a tierra.
Otras deficiencias detectadas fueron baños en pésimas condiciones y lugares para comer que no guardan higiene. El operativo fue realizado por cuatro inspectores de la Coordinación de Higiene y Seguridad Laboral de Santa Fe y tres de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, acompañados por un delegado de la Unión Obrera de la Construcción, un auditor del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (Ieric), ente realizador de una encuesta permanente sobre la situación de los trabajadores de la construcción y el trabajo en negro.