El humo era visible desde varios kilómetros a la redonda y hubo que cortar el tráfico
El voraz incendio era visible desde varios kilómetros de distancia y la Guardia Civil tuvo que cortar el tráfico en el polígono industrial de A Granxa para facilitar los servicios de extinción. La alarma se incrementó al producirse varias explosiones de pequeña magnitud y alguna de mayor dimensión, en las primeras horas del mismo. Según explicó un miembro de los servicios de extinción esto se debe a la existencia de magnesio entre la pintura de los materiales prensados de los vehículos.
«Yo vi numerosas explosiones y una realmente importante», explicó uno de los testigos que acudió a la zona tras ver el humo. También un operario de la empresa afectada por el fuego indicó a FARO que «desconocemos totalmente como se ha iniciado el fuego, es muy difícil que arda eso…»
Entre las hipótesis del siniestro estaría las del efecto lupa que provocaría una combustión instantánea en algún material del cubo.
La fabricación de estos cubos con coches es la última fase del proceso de reciclado, antes son retirados piezas que pueden ser útiles o plásticos. «Después una serie de máquinas prensan el coche y lo reducen tanto que parece imposible como también parece imposible que arda, y ya lo ven», explicaba un técnico. En este tipo de incendios, indica, «el fuego solo se extingue tras muchas horas de combustión, por ello toca esperar a que arda, y evitar que se transfiera a otras instalaciones».
La empresa comenzó ayer tarde ya los trabajos de separación del resto del material y durante la noche el traslado a la parcela que un empresario ha puesto a su disposición, mientras los trabajos de extinción han continuado. Estaba previsto que las tareas de extinción y refrigeración continuaran durante la noche.