El escribano, el arquitecto y el responsable de la construcción fueron encarcelados. Están acusados por «estrago doloso».
Se trata de William Mayer, el escribano que figura como el principal inversor del fideicomiso; Marcelo Mayer, el arquitecto que estuvo a cargo de la dirección de la obra, y Walter Bruquetas, responsable de la empresa constructora.
El fiscal de la causa, Gustavo Robineau, informó a la prensa que los tres imputados por “estrago doloso” se encuentran en condición de “detenidos e incomunicados”.
Los hermanos Mayer y Bruquetas están alojados en la comisaría primera de Corrientes, a escasos 150 metros del lugar donde se desencadenó la tragedia el pasado jueves, en el edificio en construcción de la calle San Martín al 600.
En tanto, falta que se presente ante la Justicia Elías Cohen, el ingeniero calculista del emprendimiento inmobiliario, y también Carlos Valenzuela, el capataz de la obra cuya declaración es considerada “clave” para la Fiscalía.
El derrumbe del séptimo piso del edificio ubicado en San Martín al 600 se produjo el jueves pasado y provocó la muerte a ocho obreros e hirió de gravedad a dos que aún permanecen internados.
En la puerta de la comisaría, el abogado defensor de Walter Bruquetas, Mauricio Bechara, señaló que su defendido se presentó en forma “voluntaria” y que no le llegó ninguna citación. Además confirmó que el constructor está imputado por el delito de “estrago doloso”.
Fuentes vinculadas a la investigación confirmaron que posiblemente en horas de la tarde se les tome declaración indagatoria a los tres empresarios imputados.
Ayer, la jueza Graciela Ferreyra les había negado el pedido de eximición de prisión a William y Marcelo Mayer, Walter Bruquetas y Elías Cohen.