La presentación entrará en sesión el próximo 2 de junio y luego será remitida a la comisión de Asuntos Laborales. Proponen que las comisiones médicas no sean más obligatorias. «Durante este año rechazaron el 98 por ciento de las enfermedades laborales en el trámite», denunció la legisladora Bruera.
Diputados y diputadas provinciales presentaron este martes un proyecto de derogación de la ley de Aseguradoras de Riesgo de Trabajo implementada el año pasado en la provincia de Santa Fe. La adhesión a la Ley Nacional N° 27.348 obliga a los trabajadores que han sufrido o están convalecientes por accidentes de trabajo o enfermedades, a concurrir obligatoriamente a las comisiones médicas jurisdiccionales. “Durante este año rechazaron el 98 por ciento de las enfermedades laborales en el trámite”, denunció la legisladora Matilde Bruera.
Con la firma de ocho diputados, el proyecto de derogación de la ley ingresó por sistema a la Legislatura y el próximo jueves 2 de junio entrará a sesión para recibir la adhesión de otros diputados, antes de que sea remitido a la comisión de Asuntos Laborales de la Cámara Baja. Por lo pronto, la presentación cuenta con el acompañamiento de legisladores de distintos bloques que votaron en contra de la nueva ley de ART: Paola Bravo, Carlos Del Frade, Lucila De Ponti, Agustina Donnet, Rubén Giustiniani, Bruera, Dámaris Pacchiotti y Fabián Palo Oliver.
“Otros faltan contestar pero confiamos en que se van a sumar. Aquella vez fueron 14 votos en contra”, señaló Bruera. El proyecto de derogación de ley contempla que el trámite ante las comisiones médicas previsto en la ley de riesgos de trabajo “sea de carácter voluntario u opcional para los trabajadores”. Y que en caso de que el trabajador opte por la vía administrativa previa, “agotada o no dicha instancia tendrá habilitada la acción correspondiente a la justicia laboral”.
La diputada de Encuentro por Santa Fe, del Bloque Partido Justicialista, recordó que “la nueva ley de ART fue propiciada por el anterior ministro de Trabajo (Roberto) Sukerman, por proyecto del Ejecutivo que la Cámara de Senadores aprobó por unanimidad. La adhesión de la provincia de Santa Fe a la ley de ART la había impulsado el gobernador (Miguel) Lifschitz. Después lo impulsó (Omar) Perotti. Hubo un pacto entre el Frente Progresista y el peronismo para votar la adhesión de la provincia de Santa Fe”.
Entre sus principales artículos, el proyecto de derogación de ley promueve “el carácter obligatorio el patrocinio letrado para el trabajador desde la primera presentación, ante las comisiones médicas o el servicio de homologación de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo. Con honorarios a la actuación del abogado a cargo de las Aseguradoras de Riesgos de Trabajo”.
En ese sentido, con el objeto de prevenir los riesgos de trabajo, “el Ejecutivo provincial deberá celebrar convenios con la SRT sobre la implementación de medidas de acción conjunta para la prevención de accidentes y enfermedades laborales”, refiere otro de los artículos de la presentación.
A la hora de exponer sus fundamentos, los diputados y diputadas firmantes reconocieron que “en su momento sostuvimos que nuestra provincia no debía adherir a la nueva ley; sistemáticamente considerábamos que ello violaba el acceso a la justicia ya que el trabajador debe pasar previa y obligatoriamente por un organismo (comisiones médicas), integrado por médicos que tienen que decidir cuestiones de derecho”.
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Y consideraron que las comisiones médicas “carecen de idoneidad para investigar los accidentes y enfermedades de trabajo, las condiciones y medio ambiente, y las relaciones de éstas con las enfermedades. Sólo están en condiciones de determinar enfermedades y grados de incapacidad. Al establecer la obligatoriedad de las comisiones médicas, la ley impide el acceso directo de los trabajadores a la justicia laboral”, cuestionaron.
“Es la única forma en que el trabajador se protege del rechazo del Estado, ya sea a través de un abogado privado o de un defensor público”, ratificó Bruera. “La experiencia en este año ha sido nefasta. Los trabajadores denuncian que hay dificultades para iniciar las tramitaciones en la Secretaría de Riesgos de Trabajo. Hay demoras infundadas para dar turnos. Se aprovechan del protocolo que hubo en pandemia y retrasan los turnos. Cuando un trámite tiene algún error o le falta alguna documentación, en lugar de corregirlo tienen que iniciarlo de nuevo. Es una burocracia terrible”, lamentó.
Otro fundamento del proyecto de derogación sostiene que “a un año de la entrada en vigencia de la ley 14003, podemos verificar que muchas de las advertencias realizadas se han cumplido. Tales como el rechazo sistemático por parte de las comisiones médicas de la mayoría de las enfermedades profesionales u originadas en el trabajo, las altas médicas antes de tiempo, la falta de cobertura de las reagravaciones, las deficientes prestaciones otorgadas a los trabajadores accidentados, que han hecho que el tiempo transcurrido ante las comisiones médicas es sólo una dilación inútil que impide el acceso rápido y efectivo a la justicia”.
Según Bruera, “el negocio de cualquier ART es asegurar mucha gente y pagar pocos siniestros. Los trabajadores, cada vez más indefensos, denuncian maltratos cuando van a las comisiones médicas y de la propia estructura de la Secretaría de Riesgos de Trabajo. Lo único que cabe es empezar un camino para tratar la derogación”, aseveró.
En la sede del Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de Rosario se celebró este martes una reunión de diputados que impulsan el proyecto de derogación de la ley con dirigentes gremiales y abogados laboralistas, para exponer las graves consecuencias generadas en la salud de los trabajadores. “En ningún caso ha permitido que el trabajador acceda más fácil y rápidamente a satisfacer su reclamo, como sostenían los impulsores de la ley cuya derogación se propugna”, cerraron entre los fundamentos de la presentación.