La decisión se tomó por la muerte del músico de Raras Bestias. Hay una tercera acusación al inspector municipal por incumplimiento de deberes funcionario público, que será presentada la semana próxima.
El dueño y el electricista del Café de la Flor, donde el año pasado murió electrocutado el bajista de la banda de rock Raras Bestias, fueron acusados de haber cometido el delito de homicidio culposo.
Para el propietario del local, Ariel Scharf, se solicitó una pena de 4 años de prisión de ejecución efectiva y diez años de inhabilitación para ejercer actividades comerciales.
En tanto que para Fernando Campodónico, técnico a cargo de la instalación eléctrica del lugar, se le requirió una p ena de 5 años de prisión efectiva y diez años de inhabilitación para ejercer como electricista o cualquier otra actividad relacionada.
Vale recordar que el pasado 11 de octubre Adrián Rodríguez, de 30 años, bajista de Raras Bestias, murió al recibir una descarga de electricidad cuando su grupo ofrecía un recital en el tradicional local ubicado en Mendoza 862.
Hay una tercera acusación al inspector municipal por incumplimiento de deberá de funcionario público que será presentada la semana próxima. Se presenta separada por ser otro delito y van por juicios separados.
Interviene en la investigación la fiscal Valeria Piazza Iglesias.
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